A Sheila Isabel Ortiz, otra sirena del mar
Jamás cambiaría la libertad de deslizar el bolígrafo por las páginas en blanco y filtrar los mensajes que me llegan del Universo a mi Multiverso. La buena fortuna de canalizar destellos alfabéticos para hacer sentir la fragancia de las azucenas. Jamás cambiaría escribir lo que pienso y declarar la delicia de caminar, con los pies, bien puestos en el suelo, abrazando lo recorrido. La plenitud del silencio ofrece un aplauso a la vida. El presente, como un regalo, traducido al inglés, sí, como un "present", el regalo del ahora.