Somos Aire

Caribe Imaginado

Dedicado a los músicos que interpretan
instrumentos de viento y nos hacen sonreír...

Somos aire... Somos éter. Sólo vinimos al mundo transparente para ver... Para aprender a ver los colores. Aprender de ellos, y construir con ellos, coloreando el presente.

El presente como un nuevo regalo. Somos humo y éter, etéreos con cuerpos, visitando un suelo y un camino. Admirando el susurro del viento. Aprendiendo a caminar a su favor. Escuchando música de flautas e instrumentos de viento, los cuales succionan el aire y le dan musicalidad a la vida. Soltando el aire. Elevando el alma.

El alma que se mueve dentro del cuerpo. Soltando también en el campo abierto una chiringa volando alto, dejándola libre. A desprender de las manos y lanzar impulsado... un avioncioto hecho de papel.

Aprender de lo oblicuo y apreciar el aprendizaje. Con una sonrisa amplia, por los recuerdos descosidos y los felices errores, que tejen el presente. Esculpiendo  en el ahora.

Somos éter y en la transparencia aprendemos de los colores, como un prisma diverso. Entonces, escuchamos la música aterciopelada de instrumentos de aire, que nos da forma... En el cuerpo, en el caminar y respirar. En el modo de andar... Y adquirimos otro cuerpo refrescado. El cuerpo del sentir del ser consciente. De apreciar lo transitorio, revelando lo real y presente. Del aprehender, del dejar ir, de recibir, aprehendiendo lo vivido.

Esperando ver las nubes en forma de cúmulos, cirros y estratos... efímeras en su dibujo celeste y tiempo, movidas por el aire. Sonrisa en silencio. ¡Sabiendo que somos aire! Y que nos juntaremos en algún momento con las nubes. ¿Quién ha cazado alguna vez una nube?.... Nadie... en mi mejor entender, ciertamente.

Así que mejor seamos parte de ellas y creamos en el viento. Como soplando suave unas velas de cumpleaños... Para recibir un nuevo comenzar. Sonriendo al viento...