Innovador proyecto para potenciar desarrollo comunitario en el suroeste de Puerto Rico

Cultura


El Centro de Estudios e Investigaciones del Suroeste de Puerto Rico (CEISO) y Surcando la Historia han aunado esfuerzos para promover la cultura y reevaluar el patrimonio histórico, material e inmaterial de Lajas y el suroeste de Puerto Rico. Las organizaciones están implementando un proyecto, el que se ha denominado EcoMuseo Comunitario, con el apoyo y asesoramiento del Centro de Servicios Comunitarios (CSC) de la Universidad Metropolitana (UMET) en Cupey que dirige el licenciado Eduardo Quijano.



“El proyecto es parte de una estrategia de servicio comunitario como una herramienta de erradicación de pobreza”, señala Quijano. “El EcoMuseo es un motor económico que repercutirá no solo a nivel municipal, sino regional”.

Quijano enfatiza que “la finalidad del EcoMuseo es promover un autentico turismo cultural comunitario, solidario y sustentable cuyo gasto turístico esté conectado a productos locales en un cincuenta por ciento”.

El historiador, Luis Santaliz Villabella,  integrante del equipo de trabajo,  explica que el concepto “ecomuseo” surge en el año 1971 cuando el arqueólogo, historiador y museólogo francés, Hughes de Varine, revoluciona la museología tradicional y se da paso a una visión interactiva y participativa de las comunidades. El término “eco” hace referencia a la ecología, pero desde el punto de vista de la interpretación holística de la herencia cultural. Es la gente quien hace cultura y su presencia es esencial para la supervivencia de los museos, no como almacenes de objetos, sino como un gran centro cultural.

En otras palabras, un ecomuseo es un centro museístico que resalta la identidad cultural de un pueblo, integra a sus habitantes y tiene como misión fomentar el bienestar y el desarrollo socioeconómico de la comunidad, manifiesta Santaliz.

La presidenta de CEISO, Nancy Vargas Acosta, indica que el proyecto surge de la necesidad de crear alternativas económicas que fortalezcan a Lajas y la región suroeste del país, sin perder conciencia de su identidad cultural y de lo importante que es mantener el patrimonio material e inmaterial de los pueblos.

“La región suroeste ha sido duramente afectada por la crisis económica que vive Puerto Rico”, asegura Vargas Acosta. “Los jóvenes se van en busca de oportunidades a otros lugares, nuestro patrimonio languidece y los gobiernos locales solos no pueden hacerle frente a la crisis socioeconómica que deteriora nuestras comunidades. Nos enfrentamos a convertirnos en municipios de envejecientes y de allí a pueblos fantasmas”.

La crisis y sus posibles consecuencias llevó a los líderes comunitarios a reunirse para dilucidar alternativas y evitar el deterioro económico, pero manteniendo la calidad de vida y la identidad cultural.

“Determinamos que teníamos que establecer una agenda en común, tomando en consideración la opinión de todos; que buscará soluciones reales y utilizará los recursos con los que contábamos”, añade Vargas.

Israel Román, vicepresidente de CEISO y presidente de Surcando la Historia, puntualiza que “los dos factores primordiales que salieron a  relucir fueron el turismo y la cultura”.

“La región suroeste es rica en atractivos naturales, tiene un gran acervo cultural y una gran diversidad artesanal”,  asevera Román. “Estos tres renglones bien constituidos son suficientes para  desarrollar una industria económica que cree empleos y evite el éxodo de los más jóvenes”.

Reconociendo la validez de su proyecto, el grupo se acercó primero al alcalde de Lajas, Hon. Marcos A. Irizarry Pagán y luego a Quijano en el CSC en busca de orientación y guía para desarrollar el proyecto.

“El alcalde vio la valía de nuestro proyecto y comenzamos a trabajar en conjunto con el  Departamento de Arte y Cultura y su director, Pedro A. Jusino Lugo, para  organizar la idea y ultimar estrategias”, dice Román.  “Reconociendo nuestras limitaciones nos acercamos al licenciado Quijano, quien nos ha guiado durante el proceso organizativo y ha puesto a nuestra disposición infinidad de recursos”.

Quijano, experto en desarrollo de proyectos autosustentables y un gran motivador, sugirió que el EcoMuseo debía contar con un centro de promoción, mercadeo y de partida y llegada para las excursiones ecocomunitarias en La Parguera.

“La Parguera recibe un flujo anual de 1.3 millones de turistas. Una oferta turística variada y bien organizada garantiza el éxito del proyecto”, afirma Quijano. “La cuestión aquí es calidad y costos. Los fundadores del EcoMuseo Comunitario están claro en esto. Cuentan con un equipo de trabajo altamente cualificado que tiene mucha experiencia, compromiso y sensibilidad”.

CEISO ha desarrollado un programa variado de rutas turísticas donde se enfatiza el turismo combinado.

“El turista combina  el turismo de playa, el turismo cultural, el turismo de aventura, el senderismo… en un mismo viaje”, dice Vargas Acosta. “Román ha desarrollado rutas turísticas donde habrá enriquecimiento cultural y oportunidades para que nuestros artesanos y microempresarios puedan ofrecer sus productos”.

CEISO y Surcando la Historia, junto al Centro Cultural Anastasio Ruiz y el Club de Leones, han iniciado su proyecto gestando actividades culturales.

Los grupos se reúnen en la sede de Surcando la Historia, un antiguo parque de bombas construido en los años 50 en una comunidad denominada la Calle Abajo en Lajas por encontrarse en una bajada en la salida del pueblo hacia Cabo Rojo. La sede cuenta con una biblioteca tradicional, sala de reuniones y un parque pasivo para actividades.

CEISO y Surcando están habilitando una escuela en el centro del pueblo para establecer el primer museo lajeño, que incluirá la colección arqueológica privada más grande de Puerto Rico. Mientras tanto, el lugar es usado por las organizaciones para realizar actividades culturales que incluyen exposiciones de arte y conciertos. También están habilitando un local comercial en La Parguera como oficina de promoción turística y centro para excursiones.

“Nuestro compromiso es potencializar nuestras comunidades con un proyecto innovador y trascendental, solidario y sustentable”, afirmó Vargas Acosta.