Aníbal Acevedo Vilá es el único líder político hoy en Puerto Rico, ex-presidente del oficialista Partido Popular Democrático, y ex-gobernador del Estado Libre Asociado, que ha sabido cultivar la tecnología digital. En particular, desde hace muchos años, ha desarrollado una intervención sistemática en la política nacional por vía de su boletín informativo, el cual circula en varias redes sociales y por correos electrónicos.
Ahora dio un paso adicional: se insertó en el debate nacional que su partido bajo el actual gobernador, Alejandro García Padilla, dirige en torno a un posible plebiscito en torno a la solución del estatus político actual de la isla. Dicho lo anterior y como comentábamos en la revista sabatina Página 0 en el día de ayer en El Post Antillano, una de las mayores virtudes de Aníbal Acevedo Vilá, es su inteligencia y su sagacidad política. En sus cerca de 25 años de activismo político, ha sabido siempre intervenir y dirigir hacia otra dirección los debates políticos nacionales. En esta ocasión, y en las pasadas 48 horas, lo ha logrado hacer nuevamente.
Hace apenas dos días, Aníbal Acevedo Vilá, publicó como libro electrónico a ser vendido por una de las principales casas de venta de libro en dicho formato, un interesante “manifiesto”, por llamarlo de una forma más cercana a su intención política. Bajo el título de Hacia la refundación de la economía de Puerto Rico y del Estado Libre Asociado, Acevedo Vilá se inserta de forma abierta, transnacional y de forma novel en el debate nacional de su partido y del país en cuanto a la resolución final del estatus político se refiere.
Es un trabajo interesante por decir lo mínimo, pues hace dos movimientos de forma sutil, pero acertada: por un lado introduce de forma contundente, un debate marginal no hegemónico en su partido, en torno al desarrollo de un modelo de Estado Libre Asociado Soberano. Por otro lado, introduce una idea, también desde el oficialismo que todas sus posiciones “ex” le confieren, de plantear por primera vez que la deuda soberana de Puerto Rico, la cual asciende a $72 mil millones de dólares, es impagable, pero de ser pagada que la asuma su pago el gobierno de los EE.UU.
Decir ambos preceptos, por la Internet, en un libro electrónico que se vende a $2.99 plantea un “no sé qué”, que altera el debate nacional. En respuesta a estos planteamientos, todos los líderes consultados, incluyendo el presidente ejecutivo del Partido Independentista Puertorriqueño, Fernando Martín, expresaron que había que estudiar la posición y que estaban sorprendidos por el cambio de dirección en Acevedo Vilá. Él sin lugar a dudas no es cualquier político. Es muy astuto, tiene mucho olfato, y más que nada históricamente ha sido uno de los políticos más sagaces, luego Luis Muñoz Marín y Roberto Sánchez Vilella, que ha tenido el Partido Popular Democrático (PPD).
Su intervención hoy representa la voz de una persona que ha descubierto los puntos comunes de la transformación del estatus actual de Puerto Rico, y los ha vendido como culturalmente ya se entiende la vida: por la Internet. Un soberano genio.
En cuanto a la resolución del estatus político de Puerto Rico, ¿cuáles son los puntos de un consenso, no territorial y anti-estadista?
Primero, que la voluntad del pueblo de Puerto Rico, se expresa de distintas formas en contra de la total anexión. Esto incluye el plebiscito del 2012, en el cual los votos combinados a favor de formulas en contra de la anexión, incluyendo el voto en blanco promovido por el PPD, obtuvieron una ventaja significativa sobre la estadidad.
Segundo, existe la posibilidad de un frente amplio contra la estadidad, que afirme formulas no territoriales para el desarrollo de Puerto Rico. Esto incluye, mayores poderes autonómicos al Estado Libre Asociado, el concepto de ELA Soberano, y la independencia. El PPD se divide entre más poderes soberanos bajo la cláusula territorial, la postura del exgobernador Rafael Hernández Colón y del gobernador Alejandro García Padilla, vis a vis la postura que hoy enarbola Acevedo Vilá de un ELA Soberano. A esta postura se suman, las distintas facciones soberanistas dentro del PPD, las cuales han sido esbozadas por Antonio Faz Alzamora, Luis Vega Ramos y Carmen Yulín Cruz, entre otros.
Tercero, que la situación económica por la cual atraviesa hoy Puerto Rico, es producto de la falta de poderes soberanos y la integración sin control y despiadada al marco jurídico y constitucional de los EE.UU. El efecto de esto ha sido negativo para el desarrollo sostenible del país.
Acevedo Vilá en su inserción en el debate en los pasados dos días, ha hecho algo interesante, que merece ser discutido. Por un lado, plantea, lo cual el gobernador Alejandro García Padilla también lo ha planteado, de que nadie explica como sería un Puerto Rico convertido en estado de la federación de los EE.UU. Esta pregunta es de suma importancia hoy, pues el único que ha teorizado al respecto lo fue Carlos Romero Barceló en su manifiesto de 1977, La estadidad es para los pobres. Incursiones posteriores de Pedro Rosselló y más recientemente de su hijo, Ricardo Rosselló, no abordan una defensa de la estadidad como solución política. Ninguno de los dos ha publicado un manifiesto a favor de la estadidad. En esto Romero Barceló sigue siendo pionero en su defensa de la estadidad. Pero como bien apunta hoy Acevedo Vilá, esta defensa de la estadidad como postura de estado benefactor, es la misma que le niega hoy esa opción al estatus. ¿Quieren los EE.UU. incorporar un territorio de personas que aboguen por el mantengo? Todo indica que no.
Pero de igual forma, para el campamento independentista, la misma pregunta es válida ¿Cómo se organiza la independencia de Puerto Rico? Desde la década de 1980, posiblemente, los independentistas no han explicado como esto se hace. Ahí el valor de quien llene el espacio, nos provee a su vez el contenido de la conversación.
Al final de su vida, el filósofo francés Stéphane Hessel (1917-2013) escribió un manifiesto titulado Indignaos. Realmente hablando, un manifiesto desde la perspectiva del sentir de las clases medias en torno a la crisis del capital, el estado y la calidad de vida. El manifiesto sigue siendo hoy un éxito, habiendo vendido millones de copias en distintos idiomas.
Aníbal Acevedo Vilá hizo una curiosa intervención, sin lugar a dudas, estratégicamente pensada y diseñada, para intervenir en el quehacer político de Puerto Rico. Hay que ver si este manifiesto cibernético, el cual se presume será traducido al inglés para afectar a los políticos y académicos de los EE.UU., logra imponerse como el texto de Hessel en su momento. Es un texto de cambio de paragidma, que puede establecer un consenso entre aquellos que, en la diferencia, piensan igual. Me reitero, los que pensamos igual aunque no similar, estamos en contra de la estadidad y a favor de distintos niveles de soberanía, desde la autonomía hasta la independencia, para Puerto Rico. Ahora, a debatir.