El gobernador Alejandro García Padilla ya habló de convocar un referéndum de estatus sobre la relación de Puerto Rico con los Estados Unidos; ayer en San Juan, los que promulgan soberanía dentro del oficialista Partido Popular Democrático (PPD) comenzaron una campaña educativa que, como indicó la alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín Cruz, se dará “donde nos inviten y donde no nos inviten”.
Puerto Rico ha sido un territorio de los Estados Unidos desde 1898 y su gente tiene la ciudadanía norteamericana desde 1917. Sus poderes de autogobierno se formalizaron con la creación del Estado Libre Asociado (ELA) en 1952, que incluyó la creación de una Constitución. García Padilla al igual que el exgobernador Rafael Hernández Colón han pedido la unión de las huestes de PDP bajo la insignia de un ELA Mejorado. Esta fórmula también aspira a traer más poderes a Puerto Rico, pero sin cambiar la naturaleza de la relación.
En cambio, los proponentes del ELA Soberano, incluyendo al exgobernador Aníbal Acevedo Vilá, ripostan que Puerto Rico debe renegociar su relación con los Estados Unidos poniendo fin a la jurisdicción del Congreso norteamericano sobre la Isla. Los poderes plenarios económicos (y otros) se los reservaría Puerto Rico, de manera que el Congreso no pueda cambiar a su arbitrio los términos de su relación con la Isla. Solo se podrían cambiar estos términos mediante mutuo acuerdo. De esta forma, si se negocia un fin a las leyes de cabotaje bajo el nuevo acuerdo de ELA Soberano, no se podrían reinstituir en un futuro. Lo mismo ocurriría con un acuerdo de exención contributiva federal.
Las leyes de cabotaje obligan a que la mercancía exportada e importada a Puerto Rico se transporte en la marina mercante de los Estados Unidos, la más cara del mundo. La economía de Puerto Rico se hundió cuando en 2006 llegaron a su fin los beneficios que otorgaba la sección 936 del Código de Rentas Internas federal, causando que gran parte de las corporaciones que se beneficiaban de esta exención cerrasen sus operaciones de la Isla.
El discurso tradicional de los altos líderes del PPD, y de los proponentes del ELA Mejorado, es que con la institución del ELA en 1952, Puerto Rico dejó de ser una colonia de los Estados Unidos, apreciación que no comparten los proponentes del ELA Soberano.
Acevedo Vilá, en una alocución ante una audiencia nutrida en un teatro de Hato Rey, dijo que el crecimiento de los poderes del Gobierno central norteamericano ha ido socavando los poderes fiscales del ELA. Hizo un llamado a que Puerto Rico controle “las variables económicas” en la relación con los Estados Unidos.
El exgobernador ha propuesto que los Estados Unidos se encargue de la deuda externa de la Isla, que ahora merodea los $73 mil millones, ante la imposibilidad del Gobierno de Puerto Rico en saldarla. Expuso que hay que convencer a Washington que esta cesión le conviene económicamente dado el empobrecimiento económico que ocurriría en Puerto Rico en sus esfuerzos de pagar la deuda. Añadió que si los Estados Unidos fuese a acogerla, por ser la economía más desarrollada del mundo, obtendría mejores términos que Puerto Rico, un país en desarrollo.
Enfatizó que una discusión basada en el mutuo beneficio económico sería una que Washington estaría dispuesto a escuchar, pero que mientras los partidos políticos puertorriqueños no se pongan de acuerdo en este punto, el Gobierno federal no los va a escuchar. Admitió que no ve ningún ambiente para que la legislatura puertorriqueña apruebe el plebiscito este cuatrienio, pero recalcó que, como quiera, la campaña de educación sobre el ELA Soberano tiene que darse desde ahora para eventualmente ocasionar el cambio.
A cargo de los legisladores Luis Vega Ramos, Ramón Luis Nieves y Cirilo Tirado estuvo la presentación inicial de la propuesta del ELA Soberano con énfasis especial que el ELA no es un estatus fijo sino uno de desarrollo conforme a las necesidades de la Isla. Esto, argumentaron, es algo que visualizaba el “padre” del PPD y el ELA, Luis Muñoz Marín.
Bajo la propuesta soberanista, en la negociación con los Estados Unidos se preservaría la común ciudadanía y la común moneda, entre otros poderes.
Años atrás a los soberanistas los despacharon con la etiqueta de “las plumitas liberales” del PPD, pero la fórmula del ELA Soberano sacó más de 455,000 de más de 1.2 millones de votos emitidos en el último plebiscito celebrado en la Isla (2012). La estadidad sacó el 61 por ciento de los votos en un referéndum que no fue avalado por la oposición y en que hubo gran abstención.
“¡Qué muchos somos!”, le gritó a la audiencia una jubilosa alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín Cruz Soto, al comenzar la actividad. Presentes estaban varios alcaldes, legisladores y exlegisladores, tales como el expresidente de la Cámara de Representantes, José Ronaldo “Ronny” Jarabo.