Entre la brocha y la pared: Entrevista a Roberto Hernández Nieves

Cultura

Me cautivó su obra en torno a Julia de Burgos.  En pleno apogeo del Centenario, la  obra de Julia se hace presencia en la escuela que lleva su nombre en la urbanización Los Ángeles de Carolina,  a través de la obra de toda una nueva cepa de pintores escolares y comunitarios.   Siguiendo la ruta de la musa, muchos se atrevieron a tomar el reto, y brocha en mano, transformaron una pared en canvas y un grupo de ordinarios estudiantes, maestros, consejeros y padres se transformaron en artistas.

He aquí la historia de su alquimista, el artista, Roberto Hernández Nieves, creador de esta nueva cepa de artífices y transformador de paredes, comunidades y vida.

Roberto, háblanos un poco de esta iniciativa.

“Yo tenía la inquietud de transformar a mi propia hija haciendo obras de arte.  Encontré una voz en la calle, en el arte urbano y quise llevar eso a la comunidad: el arte como herramienta de transformación de mundo.  Dos años atrás, hablando con colegas artistas,  me senté a darle forma a mis obras y luego llevándolas a la calle surgió la oportunidad para desarrollar el primer proyecto en la escuela Julia de Burgos de Carolina.  Los chicos pintan y aprenden sobre los ilustres de su pueblo y sobre su historia.”

¿Cómo comenzó formalmente Arte para Transformarte?

(Roberto se ríe y responde) “¡Esa es tremenda historia!  Resulta que le comenté a un amigo barbero (favor de fijarse en los dreadlocks) y este me conectó con el Dr. Eduardo Lugo, cliente suyo que trabaja con las escuelas y entonces es él quien me contacta para comenzar el proyecto en esa primera escuela.  ¡Toda una conspiración de causalidades!”

 

“Luego que empezamos, la consejera Aurora Arrieta (menciona lo mucho que ama y admira a esta consejera escolar) creadora del Rincón de la Paz, espacio donde los estudiantes meditan y median conflictos en la escuela, ofreció una pared adicional.  Ella  había soñado con ver murales pintados en su escuela y pintamos un juguete cerca del Rincón de la Paz.”

 

“Al trabajar la pieza que contiene a los Gigantes, Julia de Burgos, Jesús María Sanromá, Cecilia Orta, Roberto Clemente y Felipe Birriel Fernández, el Gigante de Carolina,  nosotros vamos tocando temas con los jóvenes que a veces no se estudian directamente en el salón.”

 

(Roberto ahora habla con gratitud mientras narra el milagro, porque vivir de los sueños requiere fe y confianza) “Cuando se inauguró el mural, el hijo de  Aurora Arrieta quedó tan impactado con el trabajo que se quedó con la idea y al ser nombrado director de la Oficina de Asuntos de la Juventud me llama para incorporar el proyecto en las 13 escuelas que tiene asignadas a su programa.  ¡Eso fue espectacular y yo ni lo busqué!”

¿En qué consiste Arte para Transformarte?

(Desde un espacio de profunda reflexión, el artista responde) “Yo tenía la necesidad de expresarme a gran escala y decidí regalárselo a la gente; les quise regalar mi arte.  Como lo hago es que pongo a las personas a pintar conmigo y terminamos haciendo la pieza entre todos porque la construcción de la pieza y la reflexión sobre lo que significa, la hacemos todos juntos.  Yo pienso que se nota en tu labor que lo haces por amor y no por otras cosas. Si el enfoque es meramente material el proceso es más complejo y lento.  Cuando se hace por amor se ve, se siente y se transmite.  Se siembra amor en los niños y se invita a los padres a que también pinten y esa actividad co creativa es un valor añadido.

 

También hacemos otras actividades; jugamos juegos tradicionales tales como trompo, peregrina, gallitos, canicas e incorporamos teatro y caricatura y graffiti, entre otros.  Les enseñamos a interactuar y los alejamos de los equipos electrónicos para que recuerden que es también importante relacionarse con un equipo humano.  Esto les enseña consideración, respeto y les acerca a su historia porque estos eran los juegos de sus abuelos y bisa-abuelos.”

¿Cómo te has transformado tú al hacer este proyecto?

“Yo me considero parte de un Todo.  Las sonrisas, los saludos que me dan, el sentido de pertenencia comunitario, es una enseñanza de vida que nos enriquece a todos.  Me gusta amar a la gente y que la gente me ame de vuelta. Los dones que nos dan son para compartirlos; este gesto provoca un gran bienestar social.”

¿Cómo esto alimenta a nuestro país?

“Yo creo que en la vida hay, por temporadas eventos que llegan a impactarlo todo. Nosotros exploramos ese cambio a través del arte.  Mi proyecto ofrece la visión de que todos JUNTOS podemos lograr cualquier cosa que nos propongamos.  (Aquí sonríe y la voz se le llena de esperanza). A los chicos les ayuda a seleccionar carreras, dejan de faltar porque quieren pintar, jugar.  Mi trabajo llega hasta las manos del niño; mi función es ponerlo ahí.  El niño lleva a su casa mi deseo de unidad, de paz, de amor y de creatividad en un juego o una obra y la familia lo recibe y la misión se cumple y se comparte.”

¿Y tú, te alimentas de esto?

(¡Roberto expresa triunfante!) ¡SI! Yo llevo dos años viviendo de eso y estoy feliz y nunca me ha faltado nada; a veces las cosas se tardan pero si tienes constancia y fe todo llega. 

Futuros planes de Arte para Transformarte

Ahora vamos a colaborar con una propaganda en contra del suicidio en Comerío, continuar con el proyecto de las escuelas y un proyecto piloto con jóvenes confinadas en la penitenciaria de menores en Bayamón.   Vamos a expandir el proyecto hacia los residenciales gracias al apoyo del Departamento de la Vivienda.

El proyecto tiene una página en FACEBOOK como Arte para Transformarte, en Instagram como bobsnowart o a Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo. .

Fotos: ROBERTO HERNANDEZ NIEVES