El día 4 de octubre de 2014 la organización de la sociedad civil Humanistas Seculares, mejor conocida como HUSE, celebró su Segunda Asamblea Anual en el Colegio de Abogados. Dicha ocasión sirvió para discutir la situación de la separación entre Iglesia y Estado. La actividad contó con el apoyo de varias decenas de puertorriqueños y con la visita de un representante de la organización “Hispanic American Freethinkers”, David Tamayo. En esta actividad se enfatizó la importancia, tanto para sectores religiosos como ateos, agnósticos, escépticos y librepensadores de proteger las disposiciones constitucionales que aseguran una política secular verdadera.
Humanistas Seculares es una organización que no busca la prohibición de la religión y que incluso apoya y protege el derecho de los sectores religiosos a participar del ámbito público, según declaraciones de la Lcda. Mariana Nogales en la actividad. Lo que busca HUSE es proteger la libertad establecida en nuestra estructura constitucional por medio de la separación de Iglesia y Estado. Las iglesias pueden hacer sus actividades lo que no se puede hacer es que el estado las pague, las promueva o las convierta en política pública, esos actos del Estado constituyen una violación de la cláusula constitucional de libertad de culto. Como parte de la actividad la Lcda. Nogales comentó las acciones llevadas a cabo por parte de HUSE para defender el derecho a la paz de un ciudadano de Arecibo que fue sometido a incesantes ruidos durante cuarenta días luego de que el alcalde de Arecibo declarara un ayuno auspiciado por el municipio.
En una interesante ponencia el ciudadano arecibeño relató cómo se vio sometido a las cuatro de la mañana durante cuarenta días al sonido del Shofar, el cual le mantenía despierto al menos por cuarenta y cinco minutos luego del inicio de la actividad. El ciudadano narró cómo la policía se negó a tomar inicialmente su querella y cómo el tribunal dilató los procedimientos para no hacer una determinación en el caso. Estos relatos ponen a la luz pública las debilidades del sistema de justicia. Aunque existe una cláusula constitucional, y el obvio que se está violando con los decretos de ayuno, el ciudadano común y corriente no tiene muchas alternativas legales para reclamar que el Estado cumpla con su deber constitucional. De hecho, como recientemente se ha reportado, el alcalde de Yauco dijo en televisión, en tono desafiante, “que me demanden”.
El Licenciado Edgardo Veguilla presentó la situación de la religión en las escuelas públicas. En dicha presentación se comentó sobre diferentes situaciones que son claras violaciones de los derechos de aquellos estudiantes, y maestros, que no son cristianos o que no son creyentes en ninguna religión. En la discusión el Licenciado comentó que la cláusula constitucional de separación de Iglesia y Estado se concretiza, en el caso de educación, por distintas disposiciones reglamentarias sobre los derechos de los estudiantes, procesos administrativos internos de las escuelas y derechos de la facultad. Lo lamentable es que la existencia de dichos reglamentos y normas no hacen que el Departamento de Educación tome seriamente las denuncias realizadas al respecto de dicha separación.
La discusión sobre los ayunos colocó en el centro de atención la existencia de las oficinas de base de fe que existen en los diferentes municipios y en la fortaleza. Estas oficinas, según la ley, tienen la tarea de orientar a organizaciones de base, no solamente religiosas, en procesos relacionados con la obtención de fondos para dar servicios, no para promover el culto religioso ni mucho menos para fines proselitistas. Lo interesante es que cuando estas oficinas se involucran en la organización de un ayuno municipal, que constituye una actividad de culto y proselitista, actúan en contra del mandato de ley y por lo tanto esas actividades son ilegales. Ante este cuadro en la asamblea se propuso presentar un proyecto de ley por petición para abolir las oficinas de base de fe de los municipios y de paso la de fortaleza.
En la Segunda asamblea Anual de HUSE esta organización se presenta como una alternativa para el adelanto de la defensa de los derechos humanos y la inclusión en Puerto Rico. Las causas progresistas, verdaderamente progresistas, son defendidas y promovidas por esta organización que lucha constantemente por promover una política secular en Puerto Rico. El presidente de HUSE, David Ortiz, hizo varios reconocimientos a varias organizaciones que promueven los derechos humanos y la inclusión en Puerto Rico haciendo énfasis en que HUSE quiere insertarse en el ámbito público con una meta clara, “apoyar la completa igualdad para todos los puertorriqueños”. Creo que vamos camino a una política verdaderamente inclusiva y por ello, necesariamente secular.