La última vez que presencié en vivo al conjunto Calle 13 fue en el 2005, en un pequeño show, donde aún presentaban una de sus primeras canciones “Atrévete-te-te”. Ya ha pasado casi una década desde sus inicios, van cincos discos, reconocidos premios, numerosos Grammy, recorridos por varios continentes, apoyado diversas causas sociales, artísticas y una evolución exponencial.
Volví a verlos el pasado sábado, 6 de diciembre en una multitudinaria presentación en el Hiram Bithorn de San Juan, que fue el cierre de la gira de conciertos de su álbum Multiviral. (Cifras citan que 35,000 personas fueron su público, más muchos otras por el Livestream).
Previo al concierto, en la conferencia de prensa, Eduardo Cabra “Visitante” y René Pérez “Calle 13”, entre varios puntos, destacaron la importancia de viajar y conectarse con otras culturas. Algo que este grupo hace con mucho compromiso, especialmente en sus recorridos por toda América Latina, visitando no solo ciudades sino pueblos que conservan las múltiples identidades del continente, como lo hicieron en el documental “Sin Mapa”.
Enfatizó en la necesaria unión, en la idea y en la práctica, con otros países, porque “el mundo está al revés y nosotros tenemos que ver, como boricuas, cómo nos unimos sin pensar en los colores” (Punto con el cual estoy de acuerdo, puesto que la política de los partidos tradicionales y algunas gestiones de los gobiernos parecieran más apoyar sus propios intereses económicos y de poder, en vez los intereses genuinos de los pueblos).
Durante el concierto muchas banderas de Puerto Rico fueron ondeadas por el público, y varios carteles con mensajes en pro de la liberación de Oscar López eran expuestos y enfocados en las cámaras. También, volvió a traer a colación su solidaridad con los 43 estudiantes desaparecidos en México.
El repertorio de canciones incluyó: “Fiesta de locos”, “Baile de los pobres”, “Respira el momento”, “Multiviral”, “Atrévete”, “Muerte en Hawaii”, “Tango”, “La Perla”, “Calma Pueblo”, “Latinoamérica”, “Perseguido”, “Adentro”, “Cumbia de los aburridos”, “Vuelta al Mundo”, “Vamos a portarnos mal”, entre otras.
Durante el concierto, Rene sacó un lista de peticiones que le gustaría que el Gobierno hiciera como: a) devolver el dinero que le quitaron del bono de Navidad a los empleados; b) que más que cerrar escuelas, hay que abrirlas por las tardes para dar clases de arte, música; c) hacer una asamblea de pueblo y exigir la excarcelación de Oscar López; d) devolver lo que le quitó la Ley 66 a los empleados de las corporaciones públicas y respetar el derecho a la negociación colectiva.
La percepción que tuve fue que quien siguió el concierto -presencial u online-, se lo disfrutó de principio a fin. La conexión con el público se dio. Lo evidencia la cantidad de gente que bailaba y coreaba las canciones, y que permaneció hasta pasada la medianoche escuchando su propuesta musical, atendiendo las voces musicales y sociales de este grupo que siempre ha apoyado, con su voz, a diversas causas humanitarias en América y dicho lo que piensa.
Crédito foto: Mauricio Planchart