Una respuesta solidaria: que Washington nos indemnice por el colonialismo

Economia Solidaria

Puerto Rico por primera vez ha decidido, a través de su Gobierno, no cumplir con una responsabilidad financiera, al no pagar unos $57.3 millones de dólares el pasado 1 de agosto, a ciertos bonistas que tenían un crédito pendiente ante la Corporación de Financiamiento Público (la corporación). La corporación es una subsidiaria del Banco Gubernamental de Fomento, el banco del Gobierno de Puerto Rico. Dicho impago es el primero que en la historia realiza el Gobierno de Puerto Rico, en particular desde 1974, cuando asumió el endeudamiento como vía de gestar la función pública en Puerto Rico.

Ante esta situación, es interesante como se ha dividido el País, entre los que critican de forma automática, los que se alinean con el capital, la derecha y la prensa corporativa, mientras queda una masa a veces más clara, a veces más confusa, de sectores de izquierdas, nacionalismos e independentistas, que exponen diversas posturas.

Lo más curioso es el hecho de que el capital, a través de economistas exempleados del Fondo Monetario Internacional, exponen la lógica a favor y en contra, de que hay que reducir el tamaño del Gobierno y, sobre todo, reducir el gasto público. Lo curioso es que ante lo imprudente e improcedente de estas posturas, según la prensa corporativa internacional, en las pasadas 48 horas el capital ha puesto a venta los bonos del Gobierno de Puerto Rico para que los mismos deprecien, y sean comprados y vendidos a precio de quemazón. El efecto de esto ha sido que en las pasadas 48 horas el valor de los bonos de Puerto Rico ha depreciado en un 40 por ciento. Esto es el capital, intentando recapitalizar a menor precio para revender a mayor precio.

En medio de esta manifestación de capitalismo salvaje, el Movimiento Independentista Nacional Hostosiano (MINH), por vía de su copresidenta Wilma Reverón, emite una postura oficiala que merece ser estudiada. En comunicado informativo, el MINH expresa que desea que se realice una auditoría de pueblo para saber qué se debe; que se eliminen las leyes de cabotaje; que se le dé prioridad al capital medio de empresas puertorriqueñas en las contrataciones públicas; y que se indemnice al pueblo de pueblo de Puerto Rico por 117 años de colonialismo.

Pese a que algunas de sus ideas son conocidas, la nueva postura de pedir indemnización por los 117 años de colonialismo es novel e interesante. ¿Por qué no?

Nadie le pidió al Gobierno de Estados Unidos intervenir contra otra forma de colonialismo existente en Puerto Rico, bajo el régimen español. Ahora bien, el efecto de su intervención sí fue nefasto para la economía local por la imposición de un modelo económico a beneficio de la metrópoli y por la devaluación de la moneda local en aquel momento de 1898. Dicho esto, indemnizar es un asunto lógico.

Lo cierto es que la crisis económica requiere de todas las voces que permitan superar la crítica automática y que provean soluciones y modelos concretos para salir de este atolladero donde se encuentra la isla de Puerto Rico. Hoy el MINH promueve alternativas concretas. También lo hacen una serie de puertorriqueños ubicados en la ciudad de Nueva York, que han convocado a una manifestación en dicha ciudad el próximo 13 de agosto contra la crisis y a favor de una solución pro Puerto Rico.

Cualquier manifestación o solución debe promover salidas no coloniales. No pueden haber soluciones que sean pedirle un rescate a Washington o la intervención. Cualquier solución, como hoy promueve el MINH, debe ser pro la libre determinación e independencia de Puerto Rico.

Crédito foto: Joe Shlabotnik, www.flickr.com, bajo licencia de Creative Commons (https://creativecommons.org/licenses/by-nd/2.0/)