¿Legalizar o descriminalizar la drogas?

Justicia Social

El debate global ha cambiado – se habla poco de medicalizar las drogas. Por el contrario, el debate global cada vez más apunta a una solución sencilla: se legalizan las drogas y punto. A vivir en una nueva era con drogas legalizadas. Esto le quitaría el 90% del peso que conlleva una droga ilegal ahora mismo, cuyo valor se determina por su coste de distribución y no por el de producción (menos de un 10% de su valor de venta en la calle). Lo ilegal, las pugnas de control de los distintos carteles de ventas de drogas, como a su vez la represión del estado, es lo que determina el valor de la droga en la calle. Se eliminan estos aspectos, se administra el producto como se administra el alcohol y muchos problemas deben resolverse. Se aclara, que se resolverán algunos problemas y surgirán otros problemas.

Desde Guatemala por vía de la posición adoptada por la mayoría de los estados que asistieron a la VI Cumbre de las Américas, así como por la posición que se discute hoy en países de Europa como Portugal y España, la legalización está cogiendo vuelo. Una vez se legalice, se descriminaliza todo un accionar por parte del estado de perseguir esta industria. La legalización debe llevar a administrar distinto el problema. Se podría regular el mismo de forma administrativa, y así exigir permisos y otras licencias para su manufactura como para su distribución.

Ahora bien, esto no resuelve todos los problemas. Esencialmente se piensa que legalizarla resuelve los problemas asociados a la violencia que acarea la distribución de la droga. Por otro lado, con las poblaciones droga-dependientes, aún no sabemos que pasará. Aún ni nos cuestionamos cual sería el efecto del cambio cultural en esta conversación. ¿Estamos preparados para ver legalizado el principal problema social de los pasados 40 años?

Me parece que abrir la conversación a la legalización de todas las drogas, es un cambio de paradigma muy fuerte. Independientemente del efecto-choque, es importante transitar por la discusión y ver cual es su resultado. Digo esto, pues la cultura de violencia y represión que estamos viviendo no es conveniente para nadie.