La historia ya es harto conocida: un hombre se intenta comer a otro, comenzó comiendo la cara de su víctima. En ese momento fue interceptado por una bala que le disparó un oficial de la policía de la ciudad de Miami, y lo mató en el acto. Su víctima perdió el 75% de su cara, y yace hoy en estado crítico en un hospital de la ciudad. ¿Por qué se dio el acto? Todo indica que se trata de una nueva droga diseñada/química, la cual produjo este evento. Tanto la víctima como el agresor, todo indica se encontraban bajos los efectos de la droga llamada “sales de baño”.
Ahora bien, me pregunto si las drogas sintéticas/manufacturadas producirán nuevas adicciones que provocarán otros problemas sociales. El mero hecho de que el policía que intervino produjo la muerte de una persona en el caso de Miami, nos hace pensar que la opción para liderar este problema, sigue siendo una de corte punitivo. En esta medida, pensar el problema de esta droga debe también ayudar a pensar otro tipo de solución.
Lo que uno no desea pensar es que estemos en el albor de un relanzamiento de las drogas/narcotráfico donde se busca crear nuevas formas de dependencia física y emocional. Hacer esto es expandir el mercado humano de esclavos a beneficios de unos mercaderes del placer/droga-adicción. Ante esto digo no participo.