Ofertas de campaña electoral en Puerto Rico

Caribe Hoy

altSe ofrece un término de seis años para la gobernación. Se ofrece el mecanismo de Recall, para revocar el mandato otorgado. Se ofrece la unicameralidad. Todas ofertas, que requieren enmiendas a la constitución que sólo se consiguen con la aprobación de dos terceras partes de ambas cámaras. Se omite informar al pueblo que la sección tres, artículo siete de la Constitución de Puerto Rico dispone lo siguiente:

“Ninguna enmienda a esta Constitución podrá alterar la forma republicana de gobierno que por ella se establece o abolir su Carta de Derechos. Cualquier enmienda o revisión de esta Constitución deberá ser compatible con la resolución decretada por el Congreso de los Estados Unidos aprobando esta Constitución con las disposiciones aplicables de la Constitución de los Estados Unidos, con la Ley de Relaciones Federales con Puerto Rico y con la Ley Pública 600 del Congreso Octogésimo primero, adoptada con el carácter de un convenio”.

Al electorado no se le educa, se parte de la premisa que lo importante es ofrecerle lo que desea, lo que es agradable a su oído, aunque sea jurídica y políticamente casi imposible lograrlo. Igual ocurre con la oferta del voto presidencial para los puertorriqueños. Aprobar esto requiere que ambas cámaras en el congreso federal lo aprueben con dos terceras partes de los votos y que tres cuartas partes de los estados lo ratifiquen en votación.

Fernando Savater, el filósofo español, ha escrito sobre la política:

"El lenguaje político -y con variaciones esto es verdad en todos los partidos políticos, de los conservadores a los anarquistas- está diseñado para hacer que las mentiras suenen verdaderas y el asesinato parezca respetable, y para dar apariencia de solidez a lo que es puro viento". Luchar contra la tergiversación y la máscara es la primera tarea del escritor político. Su credo empieza por el mandamiento que prohíbe mentir, aún antes del que prohíbe matar (El País,20 de agosto de 2011). El corolario de esto, es que político que no miente para complacer el mercado electoral, político que no sale electo.

Vemos como la campaña electoral se convierte cada día más en una quincalla de ofertas y en un manto donde esconder las verdaderas intenciones. Ello es así especialmente con los que tienen una agenda neo liberal que vale la pena explicar. El neo liberalismo promueve gobiernos pequeños y la garantía sacrosanta de la no intervención gubernamental para limitar la acción del capital. Ello implica reducción de agencias, con despidos inherentes. Consolidación de municipios y de Recintos universitarios de la UPR, con sus costos en cascada para la economía local y pérdida de empleos en la empresa privada. Privatización de servicios y venta de activos gubernamentales, bajo la premisa de que la empresa privada lo hace mejor, aunque prime el afán de lucro y no el servicio público. Si examinamos el record histórico, entrevista de la Lcda. Lúgaro (13 de diciembre del 2015) y del Sr Manuel Cidre (29 de noviembre del 2015) en la prensa comercial del país, se verá que ambos coinciden básicamente en esas medidas. Si vemos lo que escribió Ricardo Rosselló en la revista Forbes, veremos iguales coincidencias en la visión de cómo reestructurar el gobierno.

Los tres tienen la habilidad de articular mensajes que dan la impresión de estar bien pensados y saben decirlos con emoción. Ello hace que el elector no prevenido se fije más en cómo lo dicen, que, en el contenido y su efecto sobre el futuro gerencial, de planificación y de bien común para el país. No cuestiono sus buenas intenciones, planteo que sus teorías han fracasado en y fuera de Puerto Rico y que se han implementado a un alto costo social para la calidad de vida de la generalidad de la población, especialmente de los sectores más pobres y vulnerables. La agenda neo liberal tiene un alto costo de sufrimiento y pobreza en las masas, nos recuerda aquello que; de buenas intenciones está empedrado el camino del infierno.