Paris como Nueva York, es una de las grandes ciudades del mundo, donde habitan y se mueven miles de personas más de lo que ocurre en la ciudad de San Juan. No obstante, fuera del glamour de una vacación, los problemas visibles de Paris y San Juan parecidos.
Cuando hablamos de ciudad nos referimos a un conjunto urbano, formado por muchos edificios, con un sistema de transportación o vial complejo, una población muy numerosa y densa, y sus principales actividades económicas están asociadas a la industria y los servicios. Paris y San Juan, ambas son ciudades.
Caminando por las calles de Paris uno se topa con el problema de los deambulantes o personas sin techo. No parece tratarse únicamente de personas solas o de extranjeros. En medio de la ciudad se ven parejas dormidas sobre un colchón tirado en la acera junto con sus posesiones materiales. Algunas comparten su espacio con sus perros. También se puede observar familias extranjeras, junto con sus hijos e hijas pequeños, pidiendo la caridad del prójimo. Durante el día, al salir de la estación del metro uno se topa con vendedores ambulantes de frutas y de maíz a la braza. Cerca de la torre Eiffel, los africanos tiran en la acera sus paños con modelos de la torre y otras chucherías para venderle a los turistas.
En San Juan y otras de nuestras áreas metropolitanas, los deambulantes, las personas sin techo, los vendedores ambulantes de agua y las personas que piden dinero son parte de nuestro paisaje cotidiano. Sin embargo, en Puerto Rico uno asocia a los deambulantes con problemas de drogadicción. Desafortunadamente con más frecuencia que antes, personas afectadas por la economía recurren a vivir en la calle.
La ciudad de Paris está compuesto por 20 distritos. En términos generales, cada distrito tiene un concejal que es el líder, y éste a su vez forma parte del Concejo de la ciudad de Paris. En Puerto Rico el formato de gobierno es distinto. A pesar de tanto distrito, la ciudad de Paris la mantienen generalmente bastante limpia. Hay una conciencia sobre el reciclaje de desperdicios sólidos, su sistema de transportación es muy efectivo y eficiente. El sistema esta interconectado entre el metro (por debajo de la tierra), el tran (tren liviano por encima de la tierra) y los buses que transitan con los carros. También están los trenes para transportarse a otros lugares de Francia o a otros países europeos. A estas estaciones de trenes se puede llegar en el metro. Otro sistema de transporte, son las bicicletas de alquiler conocido como “beliv”, accesibles al público general. Y claro, en Paris se camina. Caminar es el medio de transporte básico de cualquier lugar.
En Paris, la mayoría de la población usa y se mueve a través de la transportación pública. En este sentido, Puerto Rico está bastante atrasado. El sistema de transportación pública en San Juan y en el área metropolitana es deficiente y no es confiable. Nuestro tren urbano, parecido a el “tram” francés, es uno lineal que no conecta con otros sistemas. La falta de un sistema de transportación eficiente hace que la mayoría de la población recurra al uso de los carros privados con los consabidos problemas de tráfico que ello conlleva.
En fin, los problemas y los asuntos de gobernanza de las distintas ciudades son parecidos. Lo que cambia es la forma de implementar y buscar soluciones creativas. Un ingrediente importante para lograr una mejor ciudad es tener y capturar la voluntad de los gobernantes y los residentes. Ello conlleva la participación activa de todas las partes, ayuda a aumentar la conciencia social y la resolución de problemas. La tarea no es fácil pero no es imposible. Puerto Rico no está tan atrás como algunos nos quieren hacer creer, pero hay mucho que falta por andar. Caminemos pues, hagamos ciudad.