Ready Player One, una gran película

Cine caribe

altAunque no soy aficionado a los videojuegos, la nueva película de Steven Spielberg, Ready player one, me fascinó. Tampoco soy amigo de los finales demasiado predecibles, que es lo único que podría reprocharle a este regreso de Spielberg a la ciencia ficción después de varias películas de tono serio.

Ready player one logra buen balance entre la historia virtual y la real con un despliegue impresionante de efectos visuales y un diseño cinematográfico espectacular.

El ;personaje central interpretado por Tye Sheridan escapa de su humilde realidad participando en un juego llamado Oasis que le permite a los que juegan evadirse de su vida diaria y experimentar emocionantes aventuras. Cuando muere el creador de Oasis, James Halliday, interpretado por el siempre eficiente Mark Rylance, se desata una competencia por el control del juego en el que Wade/Parzyval con ayuda de sus amigos tiene que enfrentarse a un villano que crea una organización para quedarse con Oasis.

Aunque en el film, basado en una novela de Ernest Cline, son numerosas las referencias cinematográficas, el segmento dedicado a The Shining, el clásico de terror de Stanley Kubrick inspirado en una historia de Stephen King, es lo mejor de Ready player one. Desde que llegan a la maquinilla de escribir de Jack Nicholson, las gemelas cuyos fantasmas recorren los pasillos del hotel, la sangre invadiendo el pasillo, la mujer desnuda que sale de la bañera del cuarto 237 para desintegrarse y el club nocturno en que en esta ocasión los zombies bailan, las escenas dedicadas a The Shining son memorables.

Ready player one nos recuerda en ocasiones a Minority Report y demuestra que Spielberg sigue siendo un gran realizado.