El mausoleo y la tumba de José Martí están ubicados en el Cementerio Santa Ifigenia de Santiago de Cuba. El edificio mide 26 metros de altura y 86 de largo. Antes de erigirse el mausoleo los restos de Martí estaban en el Templete del cementerio, por lo que un grupo de médicos que visitó el sitio decidió iniciar un movimiento para que el Apóstol tuviera una tumba digna de su estatura histórica. La construcción comenzó en 1947 siendo inaugurado el complejo el 30 de junio de 1951.
En el centro del mausoleo está la cripta funeraria de bronce que guarda un cofre de ese metal en el que reposan los restos de Martí sobre un puñado de tierra traído desde diferentes países de América.
La urna tiene forma pentagonal para que los restos de Marti descansen sobre la estrella solitaria, cubierta con la bandera cubana y un ramo de flores cumpliendo así con el deseo que expresó en uno de sus versos sencillos.
En los días de lluvia el agua entra por la escalinata del fondo y del frente, por lo que el choque de estas dos corrientes evoca Dos Rios, el sitio donde muriera en combate el Apóstol cubano.
En las paredes del recinto interior figuran los escudos de 20 repúblicas de América colocados en orden alfabético. Hoy en día suman 35 las repúblicas de América, por lo que 15 de éstas no están representadas allí como tampoco está el escudo de Puerto Rico que Martí mencionó en el primer artículo de las bases del Partido Revolucionario Cubano: “El Partido Revolucionario Cubano se constituye para lograr, con los esfuerzos reunidos de todos los hombres de buena voluntad, la independencia absoluta de la Isla de Cuba, y fomentar y auxiliar la de Puerto Rico.”