Líder de comunidad pobre carga bandera por buenas causas

Justicia Social

Sea en la sala de su apartamento, en frente de un micrófono de radio o de una cámara de televisión de su presencia se desprende compromiso y convicción.

 

A Roberto Pérez Santoni, mejor conocido como Papo Christian, un activista por causas sociales, no le gusta que se refieran a él como líder. Ha observado y estudiado el poder a través de sus 61 años y ve como los políticos, en particular los de su país, Puerto Rico, han abusado de él. También como maestro por vocación y entrenamiento está consciente de que la historia ha dado líderes que han sido ogros como también otros que han llegado a ser más grandes que esta por su sabiduría y benevolencia. Por razones obvias no osa compararse con ninguno de ellos.

“No me gusta que me llamen líder. Si vemos líder era Hitler; líder era (el dictador dominicano Rafael Leonidas) Trujillo, pero también Jesucristo y Sócrates”, le dijo Papo Christian a El Post Antillano en su hogar en un complejo de vivienda pública llamado el Residencial Manuel A. Pérez, el segundo más grande de Puerto Rico. “Dentro de este Macondo que es Manuel A. Pérez yo trato de ayudar al que me lo pida”. Entonces cuenta con entusiasmo como ha aconsejado a un joven vecino a que comience su negocio de comidas. A Pérez Santoni le gusta mucho la idea de la autogestión, y repudia la tendencia de muchos a esperar a que el Gobierno haga todo por ellos.

Pero él ha dado mucho de sí mismo a causas dentro y fuera del residencial. Ha participado en varias campañas, como la de evitar de que ciudadanos disparen al aire en ocasiones de celebración, una actividad que durante épocas festivas ha causado hasta muertes, especialmente de niños. Cuando viene Navidad se sabe que la voz de Papo Christian va a ser escuchada una vez más en las campañas que desalientan ese tipo de conducta.

También, participó en un esfuerzo por traer a estudiantes de las escuelas de educación universitarias para que hagan su práctica en las escuelas de Manuel A. Pérez. “Había que encontrar una manera de traer más maestros al residencial porque hay tantos estudiantes aquí. Le escribimos a la decana de educación en la Universidad de Puerto Rico, y empezaron a hacer su práctica aquí”, dijo Pérez Santoni.

Otro logro para el activista y allegados fue la apertura de un centro que provee enfermeras para la comunidad. La lucha de Papo Christian ha sido ejemplo de que la unión de la ciudadanía puede lograr mucho en un país como Puerto Rico, que padece de tanta pobreza. Actualmente, él y otros activistas están tratando de que reabra una oficina de cobro y gestiones de la corporación del Gobierno que tiene a su cargo suministrar la luz eléctrica a la Isla. Dijo que aunque esa oficina no le daba servicio directo a su comunidad sí se lo daba a áreas cercanas.

Pérez Santoni tiene una pared llena de las placas que ha recibido, pero lo que más dice de él es la pared paralela que tiene las imágenes de sus héroes, la gente que ha cruzado su camino y han superado la adversidad y otra gente que sencillamente le han ofrecido su amistad. Algo que no debe de tomar a nadie de sorpresa es que uno de sus héroes más grandes es Mahatma Gandhi.

Dice que lo importante para aquellos que se llaman líderes es el servicio a los otros seres humanos y a la comunidad. Servicio, ese es Papo Christian.