[Nota del editor: en medio del tercer toque de queda consecutivo, leemos la poesía la autora, para poder ser libres, siempre libres, pese a los aislamientos o confinamientos sociales].
(San Juan, 10:00 a.m.)
Fui presa en los espacios
me trazaron caminos y creencias
vigilaron mis pasos
mi casa mis labios
mis ojos y mi tiempo.
Y atada amordazada
me enlazaron los sueños
amarraron mis fuerzas
sofocaron mis gritos
y ocultaron cárceles y cadenas.
Entonces divulgaron al mundo
que era libre mi voz para el silencio \
y libre mi silencio sin mi voz
y todos lo creyeron.
Avezada al dolor
luego de tanta pena
rodeada de hastío por mi llanto
ya soy mil veces otra.
Apenas sensitiva apenas mansa
me promulgo y divulgo testigo de la nada
me acumulo en la niebla rinconera del cuarto
presagio mis silencios amarrados
y al mundo intolerante invalidando al hombre
y entonces por no ver
me ocultaré detrás de los espejos empañados
hasta sólo existir en la nostalgia.