¿Cómo afecta el coronavirus la desigualdad social en Puerto Rico?

Justicia Social

alt(San Juan, 11:00 a.m.) La situación que ha ocasionado la enfermedad del coronavirus ha develado la desigualdad social y la ausencia de una institución médica sólida y alerta ante las necesidades del pueblo de Puerto Rico. Debiera de existir un plan que detalle las condiciones en que se encuentran los hospitales de la Isla y las diversas salas médicas tanto públicas como privadas. Tener una cartografía de nuestros hospitales, una lista de médicos por especialización, lo mismo que de enfermeras, tecnólogos, y todo el personal que acompaña al trabajo médico es imprescindible para tener un cuadro claro de aquello con lo que contamos para proteger la salud de los puertorriqueños y las diásporas que aquí habitan. Hay que conocer las especialidades médicas, así como con qué equipo y medicamento contamos. Es muy probable que esta información se encuentre en las diversas instituciones, pero hay que recopilarlas para actuar sin desesperación ante las crisis y prever circunstancias tan terribles como las que estamos pasando.

Una gran preocupación reciente es saber qué medicamentos funcionan mejor con el coronavirus. En Cuba se ha anunciado el uso del Interferon alfa 2b humano recombinante. Este ha sido utilizado para la hepatitis y el cáncer. Algunos países lo han pedido a este país, lo que no podemos hacer de igual forma debido a nuestra situación política. Por supuesto, habría que evaluar su efectividad.

Tenemos necesidad de pruebas del coronavirus, de mascarillas y guantes para los sectores que no los pueden adquirir, vitaminas o suplementos como la C y otros que mejoren el sistema inmunológico.

Creo que lo que ha sucedido demuestra la necesidad de que la medicina pueda estar al alcance de todos y que sea socializada como la de Francia. ¿Cuántos de los que han muerto pertenecen a los sectores más pobres? En Estados Unidos se han agravado las muertes de afrodescendientes y latinos.

Lo que resulta preocupante es que se haya cambiado el toque de queda para los negocios en una época en que el virus, según ha informado el propio Secretario de Salud, se dará lo que se llama el pico de la enfermedad: del 15 de abril al 8 de mayo. Los salubristas han protestado por ello, pues flexibilizar el horario vigente podría hacer daño al aislamiento que ha logrado no expandir el virus descomunalmente. También tenemos que estar atentos a que se realicen conferencias de prensa de la gobernadora y su equipo de trabajo o task force sin que la prensa pueda hacer preguntas. Esto atenta contra la existencia del estado democrático. Tenemos necesidad de pruebas del coronavirus, de mascarillas y guantes para los sectores que no los pueden adquirir, vitaminas o suplementos como la C y otros que mejoren el sistema inmunológico. Creo que lo que ha sucedido demuestra la necesidad de que la medicina pueda estar al alcance de todos y que sea socializada como la de Francia.