La teoría del espanglish [1947] actualizada en el Siglo XXI

Cultura

alt(San Juan, 9:00 a.m.) La teoría del espanglish fue un artículo que escribió mi padre, Salvado Tió, en el 1947 y así acuñó ese vocablo en el que decía con razón que eran dos medias lenguas que no suman una.

Ecológicamente hablando yo la llamó el glifosato del lenguaje. Podríamos decir que es un transgénico del idioma, no se fertiliza, acaba siendo una lengua estéril, que nos incomunica con 500 millones de hispanoparlantes al separarnos de la lengua general. Y esto Y lo corroboramos por estudios recientes realizados por lingüistas en E.U. titulado Las medias lenguas y el espanglish, al concluir que “el espanglish en E.U. es una lengua transitoria que hablan hispanos de segunda y tercera generación criados en E.U. pero gradualmente, para la cuarta generación ya se ha ido perdiendo el contacto con su lengua materna y acaba por desaparecer.’’ *

Reconocemos que los hispanos residentes en Estados Unidos lo hablan desde el amor por su país en un esfuerzo respetable por mantener un vínculo con su lengua y cultura. Pero eso no quiere decir que lo que es respetable para una minoría hispana en E.U. sea respetable o aplicable para un país. Y Puerto Rico no es una minoría en E.U., somos un país. Y no conozco ningún país que se respete a si mismo que su meta sea graduar en sus universidades estudiantes con maestría o doctorado en franglais o inglañol.

Son reveladoras las palabras del cantante Ricky Martin cuando hace unos años afirmó que para prevalecer en "La Banda", refiriéndose a un grupo musical latino, es menester hablar bien el español y cito: “Es una pena ver a esos jóvenes de origen hispano, batallando y balbuceando el español, construyendo oraciones de mezcolanza entre inglés y español, que no son ni lo uno ni lo otro. ... Es culpa de sus padres que al emigrar a los Estados Unidos, por las razones que fuesen, no consideraron importante hablar español en su casa y enseñarles español a sus hijos…a éstos jóvenes que se colgaron en su sueño por razón del idioma, sus propios padres o tutores les cerraron las puertas.”

Debe ser responsabilidad de las familias que emigren con sus hijos transmitirles el amor por esta gran lengua, que además es una fábrica de creación de empleos.

No aprender bien el español, acaba siendo perjudicial tanto para los hispanos en E.U. y culturalmente sería un suicidio para un país como Puerto Rico.

Es absurdo que una isla, que por el poder de su lengua se transforma en un continente, lingüísticamente hablando, entregue tan magnífico instrumento de comunicación, encapsulándose en medio de la globalización.

Despacito, que nuestra lengua es una fuerza económica, lo saben nuestros cantantes, empresarios, artistas, escritores, poetas. Es otra gran industria que no debemos permitir quebrar.

Hace unos años varias firmas norteamericanas buscaron en Miami profesionales bilingües para trabajar en sus sucursales en Latinoamérica. Pero fue un fracaso, los contratados no podían redactar una carta, no tenían fluidez al expresarse y tuvieron que venir a Puerto Rico a buscarlos.

Solo el colonialismo espiritual rechaza hacer énfasis en la enseñanza del español en las escuelas, tanto públicas como privadas que acabará en el tiempo con un español inservible para la creación, para el comercio y para el poder.

Favorecemos aprender bien el inglés como segundo idioma. Pero . Ningunear la lengua por razones políticas que son perversas, y abusivas, solo llevará a desfigurar una lengua rica en matices, en giros, que equivaldría a un bulín educativo y cultural que convertiría en el tiempo a nuestra máxima señal de identidad en un lenguaje tosco, fosilizado, defectuoso, estéril, afectando el desarrollo de la inteligencia de nuestros jóvenes.

La escritora donostiarra Luisa Etxenike señala con acierto que "la relación con el lenguaje es la relación estelar de nuestras vidas y el perder ese matiz, esa ambición, se convierte en una catástrofe personal y social".

Ante la pérdida de riqueza en el lenguaje advierte: "No es lo mismo poseer 1.000 palabras que 40.000, en ningún orden de la vida, por eso creo que hay democracias de 1.000 palabras y democracias de 40.000" La reflexión viene de la constatación de la desertización que avanza en determinados campos que considera fundamentales, que son el de la cultura, el pensamiento, el arte, la creación intelectual. Y que tiene que ver también con un empobrecimiento del lenguaje. Y abunda sobre la ecología lingüística y del pensamiento porque dice que, como las selvas amazónicas, las palabras también se expolian, se violan, se maltratan y hay que cuidarlas.

Por más de un siglo hemos defendido heroicamente nuestro sagrado derecho a nuestra continuidad histórica porque intuimos que empobrecer nuestra lengua nos empobrece el espíritu. Sería una pérdida que nos degradaría, pero hacerlo de forma premeditada, es perverso. No se puede descolonizar a un país quitándole poderes y su mayor poder es su lengua. La subalternidad insufrible del idioma, sería su esclavitud. Nuestra lengua hay que aterrarla, cultivarla para fecundarnos y floreceren ella.