No estamos en un evento que deba ser ignorado. Se trata de una pandemia e históricamente está más que confirmado que una segunda ola pandémica podría ocurrir, destacándose en cobrar más vidas. El tener menos gente es ya un impacto fuerte para el país y una continua exposición de la mayoría evidente a potenciales contaminantes podría resultar en una catástrofe a nivel nacional.
(San Juan 11:00 a.m.) Ayer 4 de mayo del 2020 se dio la tan esperada reapertura de negocios bajo ciertas medidas de seguridad para prevenir el contagio. Fuera de los servicios esenciales incluyendo lo relacionado a mantenimiento de los vehículos para los que bajo esta categoría trabajan; ¿Es prioridad abrir “Fast food”, restaurantes, tiendas por departamento, entre otras facilidades comerciales?
Por ello es que el gobierno está supuesto a suplir de los bienes esenciales o de fondos para poder adquirirlos. Por desgracia solo escuchamos excusas y amenazas por parte de la gobernante de la isla, Wanda Vázquez Garced.
Entonces pregunto: ¿A quien(es) es que ayuda las medidas medidas implementadas? ¿Sera que ya no recordamos que hay boricuas damnificados, vagando o pidiendo limosna? A este ritmo, la pandemia acaba y Puerto Rico se recluye en un centro de salud mental, digo un centro comercial. Que alguien por favor me recuerde las funciones del gobierno.