“Nadie descubrirá tus huellas”, un comentario breve

Justicia Social

alt[Nota del autor: Reseña/comentario al libro Nadie descubrirá tus huelas, de Luis Alejandro Polanco * Mara Daisy Cruz * Awilda Cáez * Layda Melián * Milagros González Rodríguez (Amalgama G7 - Colectivo Literario; Novela policíaca; Santo Domingo, Editorial Santuario; San Juan, País Invisible Editores, 2019)].

(Santo Domingo, 10:00 a.m.) En cierto modo, esta obra podría considerarse como una "novela coral", tanto por la amalgama de voces yuxtapuestas que piensan, interactúan o monologan, como por el entramado de las que se fusionan para contar una historia policial con ribetes de "thriller" antillano. Es un texto literario homogéneo, de ostensible humor negro, en el que no se advierten a simple vista fisuras, apenas unos cambios de tono, lo cual constituye un logro de sus autores, cuatro puertorriqueñas y un dominicano-boricua

Como ficción, el tema mismo me parece ya un aspecto innovador, si se toman en cuenta los variados registros y tópicos de la novela urbana de nuestro hemisferio, que oscila entre la historia y la política, lo social y lo psicológico, la biografía y el testimonio. En esta novela, en cambio, la investigación policial se convierte en hilo conductor, a través de una sucesión de cuadros o secuencias, a base de "flash-backs" que mantienen en vilo al lector.

Para un lector caribeño de habla hispana es obvio que se trata de una novela puertorriqueña a carta cabal, escrita con una técnica fluida por cinco narradores que conocen bien su oficio y hacen patente la idiosincrasia puertorriqueña a través del lenguaje y los giros coloquiales: esa rica paleta de expresiones y diálogos entre personajes de la clase media urbana.

La novela admite varias lecturas y creo que una de las más reveladoras es la del submundo de corrupción, crimen, sadomasoquismo, prostitución y envilecimiento humano que circula en las doscientas y tantas páginas de la obra; una sórdida realidad que corroe las entrañas de la Isla del Encanto, la cual ha padecido durante décadas los embates del poder y el dinero, ambos reunidos aquí en un fastuoso símbolo: el Hotel Dupont Plaza, objeto de un incendio criminal la noche del 31 de diciembre de 1986 y que cobró las vidas de casi un centenar de personas y numerosos heridos.

El condominio como reflejo de la sociedad urbana de hoy queda al desnudo, con sus contradicciones de solidaridad/recelo, vecindad/aislamiento, realidad/superchería, que son algunos de los aspectos que perfilan la existencia de un puñado de personajes confinados en sus apartamentos. Es un mundo que reproduce en miniatura las neurosis y el desquiciamiento de mujeres y hombres alienados en el consumo, la droga, el alcohol, las orgías.

Cabe señalar el papel de la mujer como eje de la interacción social, pero también como sujeto manipulador y manipulable, víctima propicia de la instrumentación machista y oficiante privilegiada de la superchería popular. Al pasar revista a la galería de personajes femeninos de la novela, unos hilarantes y otros patéticos, uno se percata de que son más ricos que los masculinos, no solo por el nivel de detalles corporales y matices lingüísticos, sino por la exploración de los laberintos mentales que recorren las mujeres para sobrevivir al naufragio de la vida cotidiana.

Como toda novela de este género, bien concebida y plasmada por los narradores, en el último capítulo se descifra todas las claves de la intrincada trama, siendo las más asombrosas las respectivas identidades de víctima y victimario del homicidio de Glori Saleta, y los tenebrosos pasadizos recorridos hasta salir del túnel.

En suma, "Nadie descubrirá tus huellas" abre un nuevo sendero en la narrativa puertorriqueña actual y habla muy bien de la Maestría en Creación Literaria de la Universidad del Sagrado Corazón donde completaron su formación literaria los autores. ¡Enhorabuena!