Puerto Rico y la narrativa de la dependencia : ni cupones, ni incentivos ni Washington

Economia Solidaria

alt(San Juan, 1:00 p.m.) Reabrir la economía nacional de Puerto Rico es sinónimo de asistencia económica que proviene de Washington. Mientras Cuba, Venezuela, España o los mismos EE.UU., plantean reabrir sus economías para hacer mover la producción, en la isla la narrativa que se impone es la de los incentivos federales para motivar la economía, reabrir los comedores escolares para que en el imaginario social, unos 292 mil estudiantes vayan a comer, aunque no tengan clases, y más aun, garantizar que los municipios tengan subsidios para mantener abiertos los comedores y las casas alcaldías.

Pero nunca persona alguna ha dicho, desde el gobierno central, los municipales o desde la Junta de Supervisión Fiscal, vamos a promover la producción económica para hacer de Puerto Rico un país sustentable y sostenible. Esa es la contradicción que el colonialismo americano nos ha impuesto: vivir en la colonia es creer y promover la dependencia económica para tener dinero, subsidiado, y poder consumir productos importados. Es un soberano lio colonial.

Por lo tanto, ya hemos documentado como los principales medios de noticias del país, el GFR Media, así como las cadenas de televisión corporativas, tipo Telemundo, o los influenciado res de información a lo Jay Fonseca, se pasan todo el día celebrando la llegada de fondos federales. Esto lo único que tiene el efecto es de mover la economía del consumo que está hartamente ligada a las importaciones chinas o de los EE.UU. en la isla. Con ese consumo lo que creamos es un país incapaz de ser soberano y sostenerse por sus propios medios.

Distinto sería si el incentivo no va en metálico sino en créditos, para incentivar la producción de las personas. Desde productos agrícolas, hasta mascarillas caseras o ropa. Esto nos permitiría producir para vender o intercambiar productos y así, tener un país que dependa bien poco de Washington. Es más, con un país que no depende de Washington, no habría colonia ni colonialismo. Pensemos.