Jacob Baker [la ultima victima del racismo en los EE.UU.]

Justicia Social

(San Juan, 12:00 p.m.)  El pasado domingo en el poblado de Kenosha, Wisconsin, EE.UU., Jacob Baker fue herido de bala en siete ocasiones por la policia de dicho lugar.  Baker es un hombre afrodescendiente.  Los policías, en particular el que le disparó son blancos.  Este es el último episodio de una película sin final:  el asesinato del hombre negro a manos del hombre blanco en los EE.UU.

En esta ocasión, la policia acudió a intervenir en un episodio de violencia domestica entre dos mujeres.  De ahí, en la escena, Baker intervino, aún no se sabe por qué, y frente a sus hijos fue herido de bala por los policías que acudieron a resolver la situación. Todo está bajo investigación.

Baker permanece herido y ya estabilizado. Su padre ha informado que se encuentra inmóvil de la cintura hacia abajo.  Se desconoce si es permanente.  No obstante, la situación dio paso a severas protestas en el poblado de Kenosha donde en las pasadas 48 horas edificios y carros han sido incendiados, forzando la movilización de la Guardia Nacional de dicho estado.

La violencia policiaca contra la población afroamericana en los EE.UU. antecede al gobierno de Donal Trump, la muerte de George Floyd el pasado 25 de mayo, y todo indica que habrá de continuar.  No ha habido una respuesta clara por parte de los gobernantes de dicho país para contener la situación, la cual es simplemente inaceptable y patética. Pensemos.