Por donde quiera que me meto todo el mundo pide Igualdad. Todos los Partidos políticos la reclaman como un imán para atraer adeptos. Y yo me pregunto que es Igualdad? Mi diccionario favorito, el de la Real Academia Española, y no me acusen de hispanófilo, la define como:
“Del lat. aequalĭtas, -ātis.
- f. Conformidad de algo con otra cosa en naturaleza, forma, calidad o cantidad.
- f. Correspondencia y proporción que resulta de muchas partes que uniformemente componen un todo.
- f. Principio que reconoce la equiparación de todos los ciudadanos en derechos y obligaciones.
- f. Mat. Equivalencia de dos cantidades o expresiones.”
Hoy me enfrento a las expresiones del aspirante a la Gobernación por el método de nominación directa (Write In) Gabriel Vicens Rivera quien ha expresado: “También entendí que el primer candidato abiertamente gay estaba ya pasado de tiempo y que en vez de esperar que los candidatos, candidatas y gobernantes asumieran posturas de reconocimiento sobre nuestra dignidad humana, había que hacer algo en pos de que la equidad se garantice en la campaña y en La Fortaleza. Ya que hay un candidato abiertamente machista y homofóbico, entendí justo que debía existir un contrapeso al odio.
“Desde mucho antes de lanzar mi candidatura he buscado validar siempre las opciones al bipartidismo. Lo he hecho así porque entiendo que es necesario crear confianza en las personas que siempre han votado por el PPD y el PNP. Estos electores están disgustados, decepcionados, traicionados y abandonados por su propio partido. Es por eso que he endosado candidaturas del Movimiento Victoria Ciudadana (MVC) y del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP) a distintas posiciones en las papeletas legislativas y municipales del país.
En el caso del PIP el 100% de los candidatos son independentistas y en el caso de MVC nunca pregunté por sus preferencias de estatus y resulta que he endosado a independistas, personas que creen en la libre asociación y estadistas. En la unión de voluntades y disposición a trabajar en equipo -respetando nuestras diferencias- es que está la fuerza para el cambio a la que aspira la mayoría del país.
“Solo para que vean el poder de los medios y cómo los utilizan para beneficiar al bipartidismo, les hago este recuento de sucesos.
“Antes del anuncio del debate de Wapa TV, ya había hecho gestiones para una entrevista y me habían dicho que sí. Anuncian el debate y tuve que volver a comunicarme y preguntar si no iban a dar la entrevista si tampoco me iban a invitar al debate. Me dan la entrevista, hago el emplazamiento y ese día pusieron todas las noticias de política en sus plataformas digitales y en las redes sociales excepto la mía. Tampoco volvieron a pasar la entrevista en la noche como suelen hacer. Al ver la ausencia de cobertura digital y de redes, volví a comunicarme. La respuesta fue una invitación a una segunda entrevista cuatro días luego de la primera. Esa segunda entrevista nunca se publicó a pesar que fue Wapa TV que me invitó a la misma. Las “razones” para seguir posponiendo una entrevista que se grabó hace más de dos semanas fueron innumerables, casi improvisadas. Se grabó como un “Live on Tape” y se supone que saliera ese día. En nada les importó que sacara de mi tiempo, hiciera cambios en la agenda cuando lo sencillo era decirme que no quisieron darme el tiempo y espacio igual en las plataformas digitales.
“Medios como GFR Media y el Vocero me dijeron que se iban a comunicar para entrevista y tampoco lo hicieron; otros ni el saludo de vuelta ofrecieron. Este bloqueo mediático no es solo una dificultad para una nominación directa, es así para toda alternativa al bipartidismo y de eso puede dar fe el PIP, MVC Y candidaturas independientes. Los retos y las dificultades de una candidatura por nominación directa siempre las supe, así que no me sorprende.
No puede haber democracia en las colonias ni con medios que están para servirle a dos partidos que han gobernado al país. Como dijo Malcom X: “Si no están prevenidos ante los medios de comunicación, los harán amar al opresor y odiar al oprimido”.
Yo añado: ¡Igualdad tiene que ser la consigna! Por eso, vuelvo a insistir que no podemos estar -ni candidatos ni seguidores- en esa pelea por el tercer lugar: tenemos que lograr que rojos y azules se disputen el penúltimo lugar. Pero, si no fomentamos esa confianza en los electores que han logrado los partidos tradicionales, se hará muy difícil convencerlos que representamos un cambio.
Quedan 22 días para las elecciones, todos nuestros esfuerzos deben ser para contribuir a derrotar al bipartidismo, no solo porque nos han fallado, sino para adelantar esa agenda de país a la que aspiramos todos, todas y todos.