Cuba contra el bloqueo y contra nuevos intentos de desestabilización

Política

(San Juan, 9:00 a.m.) Cuba reiteró este miércoles la denuncia pública sobre el papel de Estados Unidos (EE.UU.) en la incitación a movimientos internos que buscan el cambio de régimen en el país caribeño, política que auguró está destinada al fracaso.

El ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez, indicó que las autoridades de la isla no van a permitir que la agresión permanente del Gobierno de EE.UU. y sus intentos de dañar la paz social, vayan a "aguar esta fiesta", en relación con la reapertura de la vida social y económica del país.

En ese sentido, ratificó que la respuesta ante las provocaciones se hará con estricto apego a la legalidad cubana.

Denunció que el eje central de la intromisión estadounidense consiste en presentar a Cuba como un Estado fallido, como justificación para incrementar el bloqueo económico, comercial y financiero contra el país.

Detalló, en ese sentido, el reforzamiento de la política de guerra económica bajo la administración de Donald Trump, mantenida por el Gobierno de Joe Biden.

Acusó a la Casa Blanca de intentar provocar un estallido social en Cuba con el reforzamiento de esas medidas de acoso, para lo cual usa una maquinaria comunicacional que catalogó de poderosa.

Puntualizó que esa campaña comunicacional conecta con las acciones de grupos violentos con presencia en Cuba y fuera de ella, y detalló la manera en que plataforma Facebook tolera los discursos de odio, lo cual viola no solo el derecho internacional, el propio derecho de EE.UU.

Sobre la actual coyuntura, dijo que se dirime el derecho a la soberanía de un pueblo frente a los intentos de una superpotencia de imponer por la fuerza un cambio de régimen, por lo cual se trata del derecho del pueblo de Cuba a la paz y a la soberanía.

Ejemplificó cómo el Gobierno de EE.UU. se ha explayado en amenazas de represalias contra Cuba ante la respuesta que la nación caribeña dé al desafío al orden constitucional previsto para la semana próxima.

El canciller calificó las declaraciones de funcionarios estadounidense de cínicas y de callar ante la represión en otros lugares, incluyendo la que tiene lugar en países de América Latina.

Desmentido de ayuda humanitaria

El ministro de Exteriores desmintió que el Gobierno de EE.UU. hubiera enviado ayuda humanitaria a Cuba y ejemplificó que ni siquiera cuando se produjo la crisis del oxígeno en el verano, cambió esa política. Antes bien, dijo, obstaculizó esa ayuda.

Rodríguez denunció la politización de la migración con la obstaculización del flujo normal de ciudadanos entre ambos países, en particular la restricción más reciente relacionada con la vacunación, lo cual calificó de discriminatoria, porque la eficacia y efectividad de las vacunas cubanas han quedado demostrada en la práctica.

En un paréntesis, el canciller cubano dijo que La Habana espera la pronta aprobación de sus vacunas por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y recordó que la política hostil de EE.UU. obstaculizó el propio proceso de producción de los fármacos cubanos con sus medidas de bloqueo.

Informó que el viernes pasado, el Departamento de Estado de EE.UU. se dirigió a la Embajada cubana con una supues ayuda de vacunas, cuando el país ya ha superado el 90 por ciento de su población con alguna dosis. Dijo, asimismo, que dicho ofrecimiento llevaba condiciones oportunistas y sin efectos prácticos.

También anunció que Cuba hizo la contrapropuesta de utilizar esas vacunas estadounidenses, junto a las vacunas cubanas, en la inmunización de países de la región, necesitados de las mismas.

Que EE.UU. justifique su política hacia Cuba

En su intervención, el canciller cubano emplazó al Gobierno de EE.UU. a que justifique el pretendido cambio de prioridad en su política hacia Cuba, adoptada en el verano pasado, según recientes declaraciones de funcionarios estadounidenses.

Denunció el financiamiento a organizaciones que promueven el cambio de Gobierno en Cuba y dijo que ello ha provocado un ambiente de incitación al odio y la violencia en las redes sociales.

Ratificó que el Gobierno cubano no permitirá ninguna intentona que pretenda el cambio de régimen, y que lo hará con apego a las leyes cubanas; así como dijo que Cuba rechazará cualquier intento de intervención.

Calificó de fracaso e inviable la política de intromisión y hostilidad de E.UU. hacia Cuba, por lo cual le exigió desestimarla y alertó a los representantes diplomáticos de la posibilidad que sedes diplomáticas de la isla en el exterior sean objeto de ataques.

Rodríguez pidió la solidaridad de las naciones allí representadas, así como de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y su sistema institucional ante esta nueva escalada anticubana y llamó a defender, el derecho a la libre determinación y la soberanía de los pueblos.