(San Juan, 1:00 p.m.) El Partido Nuevo Progresista, por enésima vez es foco de atención necesariamente innecesaria. Han logrado crear una cultura de corruptos, que estos se reproducen continuamente de la misma forma: se trata de vendedores de sueños a contratistas, a cambio un “bonito” para el funcionario público.
Según nuestras fuentes internas en la Corte Federal de San Juan, Félix “el Cano” Delgado se dedicó a incriminar a toda persona que pudo, a cambio de un solo cargo, y un tratamiento que hasta hoy ha demostrado ser “con guantes de seda”. Eso se diferencia, del trato que han recibido otras personas en la misma corte, por lo que, según nuestras fuentes, eso solo corresponde a que como parte de su negociación (declararse culpable a cambio de incriminar a terceros), lo que está en juego es el esquema de corrupción del Partido Nuevo Progresista (PNP). Es decir, lo que ha abierto el Cano Delgado, es la relación entre contratitas y funcionarios intermediarios corruptos, con el PNP.
Pierluisi, el gobernador de turno, está preocupado pues todo indica, por las declaraciones de la fiscalía federal, que el proceso de acusaciones contra funcionarios del PNP, comenzó al año de la elección de este. En otras palabras, las prácticas de corrupción andaban adelantadas, entre la administración de Wanda Vázquez y la nueva administración de Pierluisi.
Ahora es momento de cuestionar la honestidad de un partido político que utiliza el poder para adelantar su riqueza personal. El PNP es un partido que históricamente ha demostrado lo pobre que es su administración pública. También han demostrado lo delincuentes que son en la apropiación de fondos públicos. Es momento de castigarlos: en las próxima elecciones, no le des tu voto al PNP. Pensemos.