(San Juan, 1:00 p.m.) Volver al 2022, cuando no se ha terminado el 2021, es como hablar sin sentido. Realmente hablando, de intentar no vivir lo vivido durante este año, en aras de no repetirlo el año entrante.
Ha sido un momento dificil. Pero sin lugar a dudas el primer año de la administración de Pedro Pierluisi, ha sido por decir lo mínimo, decepcionante. En la medida que la corrupción dentro de su partido sigue cabalgando sin control es muy difícil apostar a un gobierno limpio y eficiente desde su perspectiva.
Dentro de esto, es pertinente indicar, que él tampoco logró resolver el problema del estatus, ni atraer fondos federales para incorporar aún más a Puerto Rico a los EE.UU. Por lo tanto, es difícil medir adecuadamente a su gobierno.
Finalmente, la criminalidad fuera de control, en particular la violencia callejera, nos hace pensar que Pierluisi es un mal administrador. Por lo cual, ¿qué debemos de hacer con él? De nuestra parte, no volver a votar por el Partido Nuevo Progresista. Es momento de terminar con este partido y su cultura de la corrupción. No repitas el 2022.