¿Por qué aún no he comulgado? [por ser gay la iglesia católica no me lo permite]

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El domingo pasado acompañé a mi amada Europa Piñero González a la hermosa Iglesia de Jesús Mediador. Para mí es un remanso de paz y un sentido de comunidad visitar este espacio. Rezamos por el querido Alfredo Del Valle y por la salud de su hermana Imgard L. Piñero. De regreso a casa conversamos sobre la religión católica y el por qué yo no comulgué. Con dolor en mi alma le dije que aunque soy católico converso, soy gay y sería pecado hacerlo...

Con estos pensamientos en mente me enfrento a que estamos en el mes de Junio, lo que marca el inicio del ‘Pride Month’ o Mes del Orgullo. Esta festividad se lleva a cabo para celebrar la autoafirmación y visibilidad de las personas que pertenecen a la comunidad LGBTQ+. Además, concientizar sobre la lucha por la igualdad y la dignidad de las personas lesbianas, gay, bisexuales, trans, intersexuales, queer y asexuales.

Además de las marchas que comenzaron a realizarse cada año, se popularizó el uso de la bandera del arcoíris como símbolo de la comunidad LGBTQ. Gilbert Baker, un artista de San Francisco, fue el creador de la bandera en 1978.

Todos los colores de la bandera guardan un significado. El rosa fuerte, antes de que lo quitaran, significaba sexo, el color rojo significa vida, el naranja significa curación, el amarillo significa luz del sol, el verde significa naturaleza, el azul significa serenidad, y el violeta significa espíritu.

Y me regocijo cuando me entero del P. del S. 485, para establecer la “Carta de Derechos de las personas LGBTTIQ+”.  La medida, presentada por Irma Rivera Lassén y Rafael Bernabe Riefkohl del Movimiento Victoria Ciudadana (MVC), busca reconocer los derechos y protecciones de la comunidad LGBTTIQ+ en un documento oficial que las personas utilicen para denunciar casos de discriminación. 

Entre las entidades que apoyaron la medida legislativa, están  La pieza legislativa fue respaldada por entidades como la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés), Waves Ahead, True Self, Puerto Rico para Todes, el Instituto Sexológico Educativo y Psicológico de Puerto Rico, el Colegio de Abogados y Abogadas, Proyecto Matria, el Comité Amplio para la Búsqueda de la Equidad y DiversasPR de Amnistía Internacional, entre otras muchas más.  

Cuando más feliz me encontraba, como un golpe en el esternón, me entero de que la Comisión de Derechos Humanos y Asuntos Laborales del Senado retiró a última hora este proyecto de ley. El proyecto pretendía proteger por vía de la legislación para que nuestra Comunidad pueda gozar de una vida plena donde puedan manifestarse libremente en prácticas cotidianas, afectivas y sociales, seguridad de empleo, a igualdad de condiciones sociales, salariales y económicas, recibir servicios públicos y privados sin ser discriminados, educación, vivienda digna y el poder de adquirir, arrendar, enajenar propiedades sin discriminación, pleno acceso a los servicios de salud.

Deseo de todo corazón que en este Mes de Orgullo se apruebe esta medida, aunque sé que tomará siglos antes de que la Iglesia Católica me permita comulgar como cualquier otro católico más…