Los renglones torcidos de Dios… una buena película de suspense con un detalle…

Cine caribe

Ver películas en plataformas digitales es un atentado contra los hermanos Lumiere.  Desde el inicio, el cine, era un encanto entre el Gaze, la oscuridad y la conspiración.  Acto, el de conspirar, que podía incluir un beso, una mano agarrada, hasta asuntos de mayor profundidad. Pero una película por plataforma… bueno, es algo post el placer de vivir en la oscuridad.

Los renglones torcidos de Dios (Dir. Oriol Paulo, España, 2022) es la película que toda la familia habla en estas navidades. Es una película en ritmo suspense, es decir, tiene trucos de terror todo el tiempo, en la cual por enésima ves vivimos la experiencia del psiquiátrico.

Aquí la esposa-víctima, quien es a su vez una detective privada, Alice Gould (Bárbara Lennie) se enfrenta a un reto: entrar a un hospital psiquiátrico para develar una muerte misteriosa. Lo hace con total anuencia de su “psiquiatra”, quien le pasa la paciente al jefe del hospital, Samuel Alvar (Eduard Fernández).  La intriga corre de lo más bien, hasta que llegamos al final, donde todo, o mucho, se confunde.

La película te mantiene todos los pelos, digo todos los pelos, de punta.  Está bien manejada, y la verdad se produce y reproduce con la verdad, que se vuelve a reproducir. Al final, uno no sabe quien dice la verdad, pero le cree a la paciente-detective Gould/Lennie.

En fin, un rollo interesante del cine independiente español, en este caso de la Comunidad Autónoma de Barcelona.  Vale la pena verla, aunque el final es de dudosa repetición, por un vuelvo que sí usted vio toda la película, se da cuenta que no es coherente.

Pero en fin, a su discreción.  Una película para dormir temprano.  A verla.