Recientemente se cumplieron 125 años del nacimiento de Federico García Lorca, a quien le debo mi matrimonio con la actriz Estela de la Lastra y el nacimiento de mis dos hijos mayores Pedro Luis y Estela Mari.
Yo era el maestro de ceremonias de la premiación de la revista Cinema en la sala Talía, ocasión en que también recibí el premio de Mejor Locutor del año en la televisión cubana. Esa noche Estela ganó el premio de Actriz Revelación del año en teatro por su actuación en la obra de Lorca, La casa de Bernarda Alba.
Era la primera vez que la veía y fue amor a primera vista. Nos hicimos novios y en la próxima premiación, de la revista Show en el Hotel Capri, fue ella quien me entregó mi segundo premio de Mejor Locutor del año en la televisión.
La primera foto es de la noche en que la vi por primera vez en la premiación de la revista Cinema en la sala Talía. La segunda es de la noche en que me entregó el premio de la revista Show en el hotel Capri varias semanas después. En el calce de la primera foto el redactor se equivocó y confundió La casa de Bernarda Alba con Yerma, otra célebre obra de Lorca. Las primeras fotos son de 1961, la de la boda de 1962.
Recordando a Federico García Lorca
