La rana y el alacrán [o la lucha de clases electoral en un paraíso colonial]

Política

(San Juan, 9:00 a.m.) La metáfora de la rana y el alacrán se circunscribe a la relación del transporte sobre aguas turbulentas. Al pasar, el alacrán pica a la rana, y esta muere. Antes de morir, le increpa por qué le picó si le estaba ayudando a cruzar. El alacrán contesta, “porque está en mi naturaleza”. Hay algo de esto en la política electoral hoy en Puerto Rico.  No importa qué hagamos, no se puede perder de perspectiva que el proceso electoral es de corte colonial.  Siempre te va a picar.

Los partidos históricos, el Partido Popular Democrático (PPD) y el Partido Nuevo Progresista (PNP) han hecho todo por quedarse en el poder, y ganar las elecciones.  Han salido victoriosos. Nosotros, los que hemos creído en el Partido Socialista Puertorriqueño o en el Partido Independentista Puertorriqueño o en el Movimiento Victoria Ciudadana, debemos de pensar que el proceso electoral es como la venta de un producto, que si gusta, tiene audiencia y seguidores, se compra. Todo indica que por múltiples razones, la venta del producto electoral no ha sido la más exitosa.



Bajo la premisa anterior, hay que pensar que la lucha de clase colonial es un elemento en contra de los partidos que creen en la independencia. Mientras, por otro lado, la presencia y postura de Washington, es muy clara en  no apoyar la independencia, por lo tanto no reconocer a estos partidos. Lo que no sabemos es cuánto hace para manipularlos y descarrilarlos. 

Por lo que, pensemos en todo momento que de participar en el proceso electoral, debemos de tener el mismo nivel de malicia que tienen los partidos dominantes.  En particular, que todas y todos estamos enfrascados en la lucha de clase electoral, y esto es sin misericordia alguna para nadie. Pensemos.