El ex –secretario de justicia de Puerto Rico, Antonio Sagardía, habrá de ser acusado próximamente en Puerto Rico por cargos de malversación de fondos públicos, falsa representación ideológica, y violaciones a la Ley de Ética Gubernamental.
En resumen, que utilizó la tarjeta de crédito que le concedía el gobierno para fines no autorizados por ley; y por otro lado, que en un caso particular modificó las disposiciones reglamentarias, para intervenir en un caso, el cual se lo refirió a su socio de oficina, para beneficio del pecunio personal de éste. Lo interesante es que la investigación que ahora culmina en 10 cargos en su contra, fue iniciada por el propio gobierno que lo había nombrado a ser secretario de justicia. La diferencia es que la investigación la procesa el gobierno del partido político contrario a los intereses de Sagardía.
En cualquier isla del Caribe, este evento sería una saga adicional, entre las lógicas de la política nacional. No obstante, en Puerto Rico se torna en un evento sin paralelo por consideraciones que lejos de ser jurídicas, parecen ser más que nada vendettas políticas. Sagardía lejos de ser una figura política querida, todo indica que tiene profundas enemistades con distintas personas dentro y fuera de su partido político (el Partido Nuevo Progresista) como también dentro del partido en el gobierno actualmente en Puerto Rico (el Partido Popular Democrático). Muchas de las causas de sus distintos diferendos con terceros yacen en el año de su incumbencia como secretario del 2009 al 2010.
Ahora bien, todo indica, por la acusación inminente contra Sagardía que el mismo violó la ley en distintas ocasiones para lucro personal. Sin lugar a dudas esto no es aceptable. No obstante siempre se queda la duda de que la acusación haya sido selectiva contra él, por carecer de amistades o personas que lo protegen. Casos de corrupción, hay unos cuantos en Puerto Rico, sobre todo los pendientes de ser procesados. Las razones detrás de esta acusación hoy, la cual se convertirá en el pleito más importante al día de hoy contra exfuncionario público prominente, es algo que algún día sabremos.