Con el surgimiento de empresas pioneras en el periodismo con enfoque de diversidad sexual y de género, se empezó a manejar la información y el análisis sobre estos tópicos de una manera seria y profesional, alejada del sensacionalismo.
Cuando me invitaron a colaborar en La Silla Rota, tenía la intención de que esta columna fuera un espacio para opinar, desde la perspectiva del ciudadano común, sobre diversos temas de interés público. En ese tenor arrancamos hace algunos meses, hasta que Felipe González, director del portal, me pidió que aprovechara la experiencia y el conocimiento adquiridos al frente deOmbudsgay y, ahora, de diferentEs*, para abordar asuntos relacionados con la diversidad sexual y de género. Tiempo después, la coordinadora de opinión, Claudia Medina, insistió en que no me desviara mucho de este propósito, dada la importancia que tenía para la línea editorial del portal.
Sirva lo anterior para ilustrar, como simple botón de muestra, que los temas asociados a la diversidad sexual y de género revisten una importancia cada vez mayor para los medios de información general. Estos medios se están preocupando por acercarse con mayor profesionalismo, seriedad y un enfoque de derechos humanos y no discriminación a la problemática, demandas y reivindicaciones del movimiento LGBTIQ.
Así pues, hoy es posible advertir en los principales diarios de circulación nacional, revistas de análisis e investigación periodísticos y los portales virtuales de noticias, que los asuntos relacionados con la diversidad sexual y de género ya forman parte de la agenda informativa. Casi todos los medios de comunicación, ubicados en los distintos ángulos del espectro político/periodístico, han abierto un espacio para ocuparse de los planteamientos que se generan en torno al movimiento LGBTIQ, muchos de ellos en términos favorables.
Lo anterior, sin duda, es motivo de celebración para una democracia como la nuestra, pero no es algo que se haya generado de manera natural o espontánea, sino a consecuencia de algunos proyectos que, combinando periodismo y activismo, abrieron brecha en la cobertura informativa de estos temas en nuestro país. Con el surgimiento de dichas empresas pioneras en el periodismo con enfoque de diversidad sexual y de género, se empezó a manejar la información y el análisis sobre estos tópicos de una manera seria y profesional, alejada del sensacionalismo y la frivolidad con que generalmente se trataban, usando para ello todas las técnicas, herramientas, géneros y fines del periodismo, aunadas al carácter militante del activismo por la igualdad jurídica y política y la no discriminación de todas las personas.
En este sentido, es digna de destacar la labor de la agencia NotieSe, creada en el año de 1998 como un proyecto de la asociación civil Letra Ese que, ya desde antes, publicaba un suplemento mensual sobre salud, sexualidad y Sida en el diario La Jornada. NotieSe ha sido reconocida en tres ocasiones con el Premio Nacional de Periodismo. Gracias al trabajo realizado desde su plataforma, se dieron a conocer a la opinión pública temas como el “tanga-gate”, que involucró al ex líder de Provida, Jorge Serrano Limón, en el desvío de recursos otorgados por la Secretaría de Salud para la adquisición de aparatos de ultrasonido destinados a la atención de mujeres embarazadas, los cuales fueron usados realmente para comprar, entre otras cosas, ropa interior, trajes finos y plumas Mont Blanc. Esta agencia documentó también las violaciones a los derechos humanos de varios militares portadores del VIH/Sida por parte de las instituciones que debían velar por su seguridad social; y los casos de niñas seropositivas expulsadas de sus colegios a causa de esta condición clínica, entre otros.
Mario Alberto Reyes, jefe de información de NotieSe, considera que la principal aportación de esta agencia ha sido ir permeando en el imaginario social para desterrar la ignorancia que fomenta la discriminación y la violencia en contra de las personas con una orientación sexual o identidad de género disidentes de la heteronormatividad. Considera que NotieSe es una empresa de compromiso social más que un negocio informativo. Así mismo, entiende que los retos que enfrenta actualmente se centran en la adaptación a los cambios tecnológicos de la era digital. Sin embargo, su apuesta sigue siendo por la calidad de sus contenidos, que atienden a un total de 12,500 suscriptores entre periodistas, activistas, académicos, feministas, estudiantes y otros. Esta agencia se vincula también de manera estrecha con su población-tema, misma que, con frecuencia, es la que plantea las materias a desarrollar por parte de sus reporteros, que se traducen en contenidos exclusivos y originales.
Pero NotieSe no es la única agencia con una carrera en el tratamiento de noticias y contenidos sobre diversidad sexual y de género en México. En 2002, Víctor Espíndola fundó la Agencia de Noticias sobre Diversidad Sexual (Anodis). A decir de su actual jefe de información, Erick Kin, Anodis es un sistema de información que transmite noticias, opiniones y análisis sobre la comunidad lésbico, gay, bisexual, travesti, transgénero ytransexual en México y el mundo, a través de internet y con el apoyo de reporteros, corresponsales y colaboradores diversos. A la fecha, su servidor de internet almacena más de 23 mil piezas periodísticas, recopiladas en once años de trabajo.
A lo largo del último lustro, quizás coincidiendo con el auge de las reivindicaciones del movimiento LGBTIQ en México, muchos más medios especializados en el tratamiento de los temas de la diversidad sexual y de género han surgido en el horizonte periodístico. Algunos han sido fugaces y otros más se han sostenido pese a las dificultades que representa una empresa de comunicación de nicho. Sin embargo, conforme los temas de la diversidad sexual y de género han ido ganando terreno en los medios de información general, las perspectivas para los medios alternativos han ido mejorando también.
De acuerdo con su media-kit (que es un derroche de diseño gráfico y aplicación profesional de la mercadotecnia), “#SoyHomosensual es una comunidad en línea creada con la finalidad de tener un ambiente divertido, sin complicaciones e informado sobre lo que acontece en México y el mundo respecto al movimiento LGBT”. Sus creadores, Alberto Demonio y Alex Camarillo, cuentan que la idea surgió después de haber estado a cargo de las redes sociales de una organización no gubernamental que trabajaba los derechos sexuales. Agobiados por la corrección política y la obligación de estar cuidando el lenguaje en todo momento, decidieron armar esta iniciativa, apostando por una “comunicación limpia, inteligente y visualmente atractiva”. Sin embargo, en #SoyHomosensual no tiene cabida el material gráfico que pueda ser “visualmente fuerte o incómodo”. Los “homosensuales”, más que un medio informativo o una plataforma de militancia LGBTIQ, prefieren ser una oferta de entretenimiento y superación para esta comunidad, sin dejar de lado algunos temas políticos y sociales sensibles que pueden presentarse en ciertas coyunturas. Son “aspiracionales” (en el sentido de modelar nuevas formas de ser sexualmente diversos) para que su público diga: “yo quiero ser así”. Cuentan con un equipo de blogueros integrado por personas tan variadas como un “chico trans, un chef gay en Chiapas y un geek bisexual” que, a decir de Alberto y Alex, “son personas reales, que llevan una vida normal y pueden ser un ejemplo para otras”. A pesar de que se asumen como una empresa comercial, están dispuestos a apoyar proyectos “que valgan la pena” y son rotundos al afirmar que siempre estarán felices de respaldar cualquier expresión legítima de la sexualidad “porque antes que prácticas, miramos a las personas”.
Por su parte, Cristian Galarza coordina la “sección gay” del portal SDPnoticias, creada hace apenas ocho meses. Con un estilo casual y divertido, esta sección le está apostando al debate con sus lectores sobre los temas que les presentan a través de sus distintos contenidos, que incluyen, además de textos, videos.
Desafortunadamente, las sociedades no evolucionan por decreto legal. No basta modificar las leyes existentes o crear algunas nuevas y mejores para que las relaciones sociales de opresión y exclusión se modifiquen. Además de leyes, hay que crear políticas públicas que impulsen la diversidad sexual en un marco de tolerancia democrática y que, a mediano y largo plazo, puedan operar un cambio en la conciencia social y la cultura. Pero aparte de leyes y políticas públicas, es preciso desarrollar otras acciones sociales con el objeto de desterrar prejuicios, estigmas y relatos excluyentes y patologizadores que alientan la discriminación, ya sea desde el sistema educativo, el discurso científico u otras estructuras. En este sentido, las aportaciones que realizan a la causa de la diversidad y la inclusión los medios de comunicación que han adoptado un enfoque de derechos humanos y se han retirado con criterios éticos del todavía rentable encabezado sensacionalista, la nota burlona e insultante y los discursos de odio, es invaluable y digna de nuestro reconocimiento. Desde aquí, muchas gracias a todos ellos.
Twitter: @abrevaciones
Fuente: La Silla Rota.