Nadie lo entiende, pero se debe reconocer: Puerto Rico vive una fase sin precedente de cultura liberal. El Partido Popular Democrático, el cual llegó al poder en las pasadas elecciones de noviembre de 2012, ha impuesto un ritmo liberal único en la historia del país.
Nos habían siempre dicho que como un país históricamente colonial, no teníamos posibilidades de ser liberales y más que nada de tener repuestas radicales a problemas comunes de la vida diaria. Pues realmente, en el año 2013, hemos tenido un cambio paradigmático impresionante No solo hemos definido una política pública de inclusión a las comunidades LGBTT, sino que a su vez hemos reconocido importantes derechos a las comunidades de inmigrantes sin documentación legal que habitan en nuestro país. Por otro lado, estos nuevos gobernantes han tomado postura en pro-de los derechos ecológicos que a todos nos afectan, y que a todos nos benefician. En realidad, estamos viviendo un momento que no habíamos vivido antes en el país.
En ese contexto es que se dio la votación de Richard Carrión en el seno del Comité Olímpico Internacional en el día de hoy. Un sujeto no soberano, de la colonia de Puerto Rico, aspiro como cualquier hijo de vecino a presidir el COI, y lo interesante es que por poco sale electo. En una elección compleja, el candidato dominante del mundo olímpico, el alemán Thomas Bach, fue electo con 49 votos a favor. El próximo en línea después que él, lo fue el boricua Richard Carrión con 29 votos. En otras palabras, los delegados del mundo que allí participaron vieron con buenos ojos que el representante de Puerto Rico, territorio colonial de los EE.UU, saliera electo como presidente.
Para el mundo, lo que debemos decir para ir dándole dirección a este año glorioso del 2013, es que Puerto Rico sí está preparado para asumir otros retos que nuestra condición colonial no nos ha permitido al día de hoy. Esos retos, nos permiten ser gente como cualquier otra de países soberanos en el mundo. Apostemos, pues a la igualdad de Puerto Rico.