Intentamos desarrollar una presencia regional e internacional de Puerto Rico, y muchos en los sectores de centro-izquierda, desde Calle 13 hasta el Movimiento Unión Soberanista (MUS) solicitan que Puerto Rico sea parte de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC). Así las cosas, se venden sueños y se insta a que mientras Puerto Rico no sea parte de la CELAC no hay una “América Latina unida” para frasear las palabras del canta-autor panameño, Rubén Blades.
Lo cierto es que Puerto Rico anda muy activo, por vía de su actual gobierno negociando posiciones, asociaciones y reconocimientos en distintas organizaciones regionales y del Caribe. No obstante, y ante la apertura de la 68 Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas, ningún grupo político de Puerto Rico que reclama presencia a nivel de la CELAC, asumió que como mínimo Puerto Rico debe participar en la asamblea global del planeta, cita en la ciudad de Nueva York. Esto es sin lugar a dudas terrible.
No obstante lo anterior denota la falta de consistencia en el análisis y sobre todo de la profundidad de los discursos en torno a la regionalización y caribeñización de Puerto Rico. Denota más que nada un entendido de una cultura jurídica del derecho internacional y de la práctica de las relaciones internacionales. Representa la carencia de una cultura de estado soberano. Y sí somos un territorio colonial; pero lo que no somos, es un pueblo colonial. Son dos conceptos completamente diferentes.
En esta medida, me reitero que la presencia del intelectual norteamericano vivo más importante, el afro-americano Cornell West, el cual presentan en el anfiteatro 108 de Ciencias Sociales Graduado este próximo jueves a las 7pm, es consistente con la ausencia de Puerto Rico en la ONU en el día de ayer, cuando abrió la nueva sesión de la Asamblea General. Presentar a Cornell West en un lugar para poco más de 100 personas, es un error tan garrafal de los intelectuales y profesores del primer centro docente del país, equivalente a la ausencia plena de Puerto Rico en la ONU. De los primeros uno no lo debe esperar, es decir del profesorado de la UPR, como primer centro docente, se espera mucho más.
Pero de los centro-izquierdas de Puerto Rico, también se espera más. Forcemos la soberanía en todo momento. Exijamos la presencia de Puerto Rico en cada una de las instancias de la Organización de Naciones Unidas. Esto incluye un asiento para la delegación del gobierno de Puerto Rico en la Asamblea General de dicho cuerpo.