Percibo Respiros

Creativo

altA Dolly Camareno.

¡Por su incansable gesta cultural!

Percibo respiros como aquel indio que por el hado, vio llegar los barcos y fue colonizado. El hado traería otro olor a sangre y un nuevo verbo. Descenderían los dioses de las calaveras santas. La Pinta, la Niña y la Santa María. No nos dijeron que Colón verbalizaría un caudal de nuevas palabras.

Colonato, Colonense, Coloniaje, Colonizar, Colono, Colónico. Colonia. La única Colonia que me gusta es la del perfume. Colocados en un nuevo paradigma, de habernos dejado descubrir. Confianza otorgada y pureza marginada. Cabellos arrancados del cuero cabelludo indígena para probar majestuosidad de existencia Caribeña en Europa y deleitar con especies.    Percibo el respiro de la Historia que cuenta escuchar una india llorando, por parir un hijo blanco. Percibo respiro, por escuchar un sonido emergiendo de un caracol soplado al viento llamando a congregarse para hacer perecer el respiro de Salcedo. El viento... Llevo lejos el sonido de caracol y se organizaron para probar que no era un dios. Los verdaderos dioses emergieron del barro, del tronco del árbol tallado el sexo por un pájaro y el sol. Percibo viento de agua y el agua los ha juntado. Llueve. Están corriendo entre gota y gota, no se han mojado.  Expertos silvestres, que observan eñagotaos las gotas cayendo, resbaladizas sobre las hojas. Esperan contra atacar en silencio....... El respiro de Salcedo... Pereció en el agua, cuando sumergieron su cabeza y las burbujas ascendieron a la superficie. Pereció el respiro. Así, vivimos por el respiro cuando llegamos al mundo desnudos y desnudos lo dejamos. Percibieron el respiro perene y el pulso de la vida con todo lo que representa, la maravilla que estalla del vivir, envuelta en miel y hiel. El hado continuo. Los respiros fueron percibidos. Perpetuados. Como todos los hados, los cuales espiralizados, nos han traído hasta aquí para comprobar que respiramos el mismo aire y que estamos vivos, porque estamos leyendo estas líneas...