Política

Nadie puede subestimar ni sobrestimar la relación política existente entre Puerto Rico y los EE. UU. Es una relación, de dominación, colonial y territorial, que data desde la invasión de los EE. UU. a esta isla en el Caribe en el 1898. 

El arte visibiliza lo que intenta ser invisibilizado; hay una justicia poética en la creación, que va más allá del mero símbolo, y lo posiciona en capacidad de hacedor. He ahí la responsabilidad. Y es también el anhelo por justicia social lo que emprende acciones que reestructuran nuestra realidad. 

Una de las preguntas que hay que hacer, hablando sobre el impuesto sobre el petróleo, es dónde está la oposición. Ayer se celebró una manifestación en rechazo a la imposición de un impuesto sobre el petróleo y la participación en la misma fue bastante baja. Esto no es señal de que no haya gente opuesta a dicho impuesto es, más bien, señal de que hay una ausencia de poder de convocatoria. Los sindicatos no convocan fuera de sus filas y esto es razonable, al fin y al cabo, los sindicatos no son partidos políticos. El PIP es la tercera fuerza política; representa un 3 por ciento del electorado y logró movilizar a la mayoría de los ciudadanos que estaban en la manifestación. El PPD es el partido que propone, aunque con resistencias dentro del mismo partido, el impuesto contra el que se iban a manifestar. Pero el PNP, supuestamente se opone, pero ni palabra de sus miembros en la manifestación. En el fondo a nadie sorprende, el PNP tanto como el PPD, tienen gran responsabilidad en lo que está pasando.

Anoche, el gobernador del Estado Libre Asociado de Puerto Rico, Alejandro García Padilla, le habló a su pueblo. Así no más, irrumpiendo en la paz familiar, luego de un fin de semana largo de cuatro días de relajamiento, sobre todo, para los empleados públicos, este decidió intervenir y proclamar que la crisis política está resuelta. Que en el día de hoy, él cuenta con los suficientes votos para lograr la aprobación en la Legislatura de una ley que habrá de imponer un nuevo impuesto en la compra del crudo de petróleo que se ha de importar a Puerto Rico. A este impuesto le llaman popularmente la “crudita”.

San Juan- Las relaciones entre el gobierno de Puerto Rico y los distintos gremios se encuentran ayer tensas, por las medidas impositivas aprobadas y las reducciones en los beneficios laborales adquiridos.

Un controvertible proyecto de ley que aumenta el tributo al barril de petróleo en un 68 por cierto fue aprobado ayer por la Cámara de Representantes de Puerto Rico. Concretamente, es una medida del Ejecutivo que subiría el impuesto al barril de petróleo de $9.25 a $15.50.

San Juan- El gobernante puertorriqueño Alejandro García Padilla no ha conseguido frenar las protestas de sindicatos y organizaciones de izquierda, tras anunciar que hoy no habrá cierre de agencias estatales como había anticipado.

¿Qué pasaría después de la independencia con las agencias federales en Puerto Rico y con los empleos que éstas generan?

Para facilitar la transición de la situación actual a la independencia, se designará una Comisión Conjunta de Transición, integrada por representantes de Puerto Rico y del gobierno de Estados Unidos. Entre otras tareas, esta Comisión tendrá la encomienda de examinar las funciones de las diversas agencias federales que operan en Puerto Rico para recomendar cuáles de dichas funciones se trasladarán a las agencias equivalentes del gobierno de Puerto Rico y en qué forma se realizará dicho traspaso de funciones.