Crítica literaria
Las avispas de la mala leche o Caramelos de cianuro a la carta
No acostumbro responder a dardos venenosos. (Usualmente me resbalan por la pendiente más enjabonada de la indiferencia.) No empece a conocer que si te es regalado un caballo y tú ni lo necesitas ni lo aceptas, el equino sigue siendo de su dueño, opto por enarbolar la espada de la palabra pues esta vez siento que los kilotones de toxina no sólo son enfilados hacia mi persona, sino hacia todos los que forman parte del proyecto Este juego de látigos sonrientes. Poesía puertorriqueña de fines de siglo XX y comienzos del XXI.
Sobre el drama “El caimán” de José Luis Vázquez Colón
¡Don Pedro Albizu Campo vive!
[Nota Editorial: Discurso pronunciado en actividad realizada en la Biblioteca Nacional de Puerto Rico, el 17 de junio de 2016. Para propósitos de El Post Antillano/Página 0, el texto fue editado y ligeramente modificado]
"Si entre lágrimas te canto,Â
patria mía, no te asombre,
porque es de amor ese llanto
y ese amor es el más santo Â
de los amores del hombre"
José Gautier Benítez, El Regreso…
Para fines de claridad, vamos a separar por temas las áreas en las cuales creemos que el pensamiento de Don Pedro aún está vigente con algunas leves modificaciones que habría que hacer, ubicándolo en el contexto histórico actual.
Carajo: “¡TRUMP!.....”
El ocaso se ha llenado de rosas.
Yván Silén
Cuando la poesía aprieta la realidad, el calor interno que se produce, retórico, calcina las metáforas callejeras de la literatura, “Zona de carga y descarga” (Rosario Ferré), tatuándolas en la piel. Canícula. El cambio climático exacerba la poesía; estro, efluvio de papel que exuda tinta, muchas veces contaminada de colonialidad y por eso de subalternidad.
Sobre las degeneradas generaciones en la Muestra de poesía en Este Juego de látigos sonrientes
Hace un tiempo salió a la palestra literaria la antología Este juego de látigos sonrientes prologada por el crítico Federico Irizarry Natal y con selección y unas Palabras Preliminares de Edgardo Nieves-Mieles. Y me ha parecido pertinente dentro de algunas impertinencias que le veo a la obra hacer un comentario de la misma.
El 18 Brumario de Luis Fortuño
Escrito de sobre mesa, es decir, en el momento o al momento en que culminaba la huelga del movimiento estudiantil de la Universidad de Puerto Rico en el 2010, Daniel Nina escribe y publica El 18 brumario de Luis Fortuño (San Juan, Pasillo del Sur, 2010), lo que él califica como “pura ideología” o un “panfleto político en la tradición del Siglo XIX de la cual Carlos Marx fue un gran seguidor” (p. 6). Nina se refiere a la huelga iniciada el 21 de abril de 2010, culminada según su análisis unos sesenta días después con “la victoria más importante para el movimiento estudiantil de Puerto Rico, desde que se iniciaron las pugnas y luchas sociales en el sistema de la Universidad de Puerto Rico, siendo su primera huelga sistémica la de 1948” (p. 5).
La antedicha es, pues, la tesis central que Nina elabora en un texto político cuyo título hace referencia directa al principal actor político de Puerto Rico, el Gobernador Luis G. Fortuño. Tal referencia deviene en la que podríamos considerar la tesis secundaria o el planteamiento secundario que realiza el autor para dar contenido político a su tesis central. Para Nina, la victoria del movimiento estudiantil es la “mayor derrota política y social” del gobierno o gobernante de turno. De ahí que “la huelga estudiantil se impone ante el gobierno de Luis Fortuño como su 18 Brumario” (p. 5).Errata de fe de Carlos Roberto Gómez Beras
Carlos Roberto Gómez Beras (1959-) es el Embajador Cultural de la hermana República Dominica en su segundo país, el territorio ultramarino dominicano de Puerto Rico. Formalmente, ocupa el cargo desde el 16 de enero de 1991, con la destreza de un poeta que ha sido el principal científico político de su generación, formado en la Universidad de Puerto Rico. A Carlos Roberto, Puerto Rico le debe tener y mantener activas relaciones internacionales con la República Dominicana, entre otros países caribeños o no, aun cuando su proyecto político-cultural nació en el preámbulo del fin de la historia de Puerto Rico como país caribeño. Sí, Puerto Rico se lo debe a un poeta, o a otro poeta, si no se nos olvida que Luis Muñoz Marín también lo fue. En los pasados 25 años, Gómez Beras ha gobernado las letras puertorriqueñas y caribeñas sin vergüenza, dentro de un contexto político-cultural nada favorecedor a su empedernido quehacer de editor de Isla Negra.