¿Dónde queda Ayotzinapa?
Toma tu mano
y póntela al lado izquierdo del corazón,
allí está Ayotzinapa. (Tomado de Facebook)
La historia es circular, y no lo digo solo como matemático, pues vuelvo a saber de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa a través de los diarios y cadenas noticiosas que informan de la masacre cometida con estudiantes de esa institución formadora de maestros.
Aún recuerdo cuando iba llegando al pueblo de Ayotzinapa. Íbamos en autobuses, maestros y estudiantes de maestría de varios estados de México, para participar en una Escuela de Verano para maestros de matemáticas. Creo que muy pocos conocíamos Ayotzinapa y la escuela rural. Todos admirados y curiosos cuando subíamos y bajábamos por la serranía, por lo menos, lo vi en la cara de mi compañera de asiento, una muchacha dominicana que trabajaba como asistente en un centro de investigación de los que tiene el Instituto Politécnico Nacional. Arribamos a la escuela a las cinco y media de la tarde cuando comenzaba a caer la noche.
En 1982 había llegado a México, D.F, con la idea de estudiar una maestría, fui primero a la UNAM, de allí me enviaron al Departamento de Matemática Educativa, ubicado en la Colonia Nápoles. Cuando consultaba acerca de la maestría, me informé de una jornada educativa, la Escuela de Verano en Chilpancingo, Estado de Guerrero, casualmente en Ayotzinapa, la cual comenzaría en pocos días. Salí de allí, becado con todos los gastos, comencé a sentir la generosidad de México. El sábado a las 8 am estaba instalado en autobús de camino al pueblo de Ayotzinapa.
Cuando llegamos a la escuela no vimos a los estudiantes normalistas, o estudiantes que se forman para ser maestros, estaban de vacaciones. Los directivos habían prestado el plantel para este evento de una semana de duración. A la mañana siguiente, imperó un espíritu de camaradería, previamente, hubo un toque de diana improvisada a las 5:30 am. Los compañeros maestros de Sinaloa golpearon los cabezales metálicos de las camas-literas (las camas que nos prestaron los estudiantes normalistas). Nuestra rutina de la primera hora del día sería hacer ejercicios, jugar baloncesto y nadar entre otras cosas. Luego desayunar en el mismo comedor-cafetería de los estudiantes, asistir a las distintas conferencias y talleres a lo largo del día.
En el recorrido escolar conversé con los conserjes, cocineras y otros trabajadores de la escuela y lo primero que señalaban con orgullo: “aquí estudiaron Lucio Cabañas Barrientos y Genaro Vázquez Rojas”, quienes encabezaron movimientos sociales en México durante la décadas de los 70. En las paredes se podían leer los escritos en alusión de esos personajes. Me contaron de los estudiantes de la escuela, que estaban con sus padres, en sus respectivas casas. En estos últimos días, tuve curiosidad, he hice una incursión en Youtube y observé a los estudiantes organizados en la cría de animales, siembras y otras actividades, también, con compromiso político y con su gente.
La historia es circular. Después de tres décadas vuelvo a saber de Ayotzinapa, pues surgieron noticias de los estudiantes y de la Escuela Normal Rural, pero, ¿de qué manera? De la forma más horrenda. Los diarios y las cadenas de noticias informan de un cuerpo de policía corrupto de un estado que no asume su responsabilidad de asegurar paz y tranquilidad del suelo mexicano, de masacrar a unos y desaparecer a 43 estudiantes que supuestamente se lo entregaron a los narcotraficantes. Ha pasado más de un mes y no hay señales de ellos. Los padres de los estudiantes, el pueblo mexicano, las voces del mundo claman: LOS QUEREMOS DE REGRESO VIVOS, COMO SE LO LLEVARON. Yo me uno a ellos con el recuerdo de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos.
------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------La Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos, conocida como Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, es una institución educativa de nivel superior que se encuentra en la población de Ayotzinapa, en el municipio de Tixtla (Guerrero, México). Es parte del sistema de escuelas normales rurales implementado por el estado mexicano a partir de la década de 1920. Las escuelas normales rurales concibieron un componente de transformación social, y ha sido semillero de movimientos sociales.