EL FENÓMENO DE EL NIÑO Y SUS EFECTOS EN LOS TRÓPICOS

Agenda Caribeña
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altEl fenómeno meteorológico conocido como El Niño, se produce en la Zona Occidental del Pacífico Sur.  En América este fenómeno produce grandes cambios en el clima.  Este evento se presenta alrededor del 25 de diciembre y por eso es conocido como El Niño, de acuerdo a la tradición cristiana. 

 El Niño se caracteriza con un calentamiento en las aguas oceánicas en el Pacífico Sur, especialmente frente a Chile y Perú.  Normalmente el agua oceánica en esta zona es fría y muy rica en nutrientes.  Estas aguas frías son causadas por la corriente de Humboldt, proveniente de la Antártida.  Son ricas en nutrientes y plancton lo que favorece la vida marina.  Esto permite el desarrollo de la pesca a gran escala, lo que redunda en beneficios económicos para los países de esta región.

El Niño comienza su desarrollo cerca de Australia e Indonesia, lo que afecta la presión atmosférica, se producen fuertes vientos alisios que arrastran la corriente caliente hasta las costas de Chile y el Sur del Ecuador.  Éstas desplazan las aguas frías de la corriente de Humboldt.  Los países al Sur del Ecuador, sufren durante el fenómeno de El Niño, altas temperaturas y prolongadas sequías. De acuerdo a la opinión de los meteorólogos, este fenómeno a través de los años, es el causante de los desiertos más secos del mundo, localizados en América del Sur.  La corriente de agua  caliente continúa su rumbo hacia el Norte, llegando a afectar gravemente la Costa Occidental de Estados Unidos.  El Niño afecta los procesos naturales del ciclo hidrológico, cambiando el régimen de precipitaciones de la región. La capa vegetal es afectada por la disponibilidad de agua.  En tiempos de mucha lluvia, parte de ésta se evapora a la atmósfera, otra es absorbida por las plantas para la producción de nutrientes y alguna se percola y alimenta las corrientes subterráneas. Cuando llueve muy poco, por causa de El Niño, gran parte de la cobertura vegetal muere, ocurre un aumento en la desertificación del suelo, escasea el agua potable y muchos países tienen que adoptar medidas de racionamiento.

En las costas occidentales se producen abundantes lluvias durante esta ocurrencia,  Estas precipitaciones pueden ser tan fuertes que crean graves inundaciones, sufriendo los países afectados, enormes pérdidas económicas en la agricultura, la ganadería y las estructuras como las viviendas y negocios.  Los países tropicales, donde existe la mayor extrema pobreza del mundo son los más afectados.  Es muy común el aumento de vectores causantes de muchas enfermedades. Por el contrario en el lado Este (Océano Atlántico) son comunes las grandes sequías durante esta época.  Esta falta de precipitación crea escasez de agua potable para la población, graves daños a la agricultura, la ganadería, incendios forestales y enormes pérdidas económicas.  El Niño viene acompañado de un aumento en los niveles del mar, especialmente en América del Sur.  En países del altiplano como Colombia y Bolivia, El Niño ha provocado sequías extremas, con sus consabidas pérdidas en la agricultura, la ganadería y los incendios forestales.  En algunos países de la costa occidental de América del Sur, las especies marinas emigran.  Esta emigración de especies dificulta la pesca especialmente de aquellos peces con valor nutritivo y comercial como la Anchoveta en Perú,  También se han registrado aumentos significativos en los servicios básicos que se le prestan a la población, tales como el suministro de agua y de energía.

Este año 2015, se diagnosticó la presencia de El Niño.  Fueron los países suramericanos quienes primero lo sintieron y lo diagnosticaron.   La Agencia Meteorológica de Estados Unidos (National Oceanic and Atmospheric Administration – NOAA) lo certificó mucho más tarde porque utilizan la presencia de patrones adicionales para diagnosticarlo.  Este fenómeno marítimo afecta el clima a nivel planetario.  Por ejemplo en el Océano Atlántico limita la formación de huracanes.  Pero nadie debe bajar la guardia, pues recordemos que sólo basta uno para causar enormes daños a la vida, la naturaleza y a la sociedad en general.

Contrario al fenómeno de El Niño, ocurre La Niña.  Ésta consiste en un enfriamiento inusual de las aguas del Pacífico Sur, contrario al Niño que se presenta en un calentamiento de estas aguas.  Con ambos fenómenos se han registrado cambios menores en las temperaturas planetarias, lo que da una idea de su alcance global.  Hasta la fecha no se sabe si el cambio climático que afecta al Planeta, surtirá algún efecto sobre estos fenómenos climatológicos.