Carlos Carrero y el rol del acervo histórico-cultural ante la crisis económica

Economia Solidaria

La sociedad puertorriqueña exige acción dinámica y compromiso participativo para resolver la crisis socioeconómica y cultural en la que ha sido sumida por la inacción avariciosa del liderazgo colonial, caduco e inoperante, que ha gobernado el Archipiélago Borincano en los últimos cincuenta años. La aportación de los jóvenes se hace imperante para crear nuevos prototipos capaces de transformar una sociedad sepultada por una mega deuda y corroída por el consumismo desmedido, la improductividad y el hedonismo. El desconocimiento histórico, la falta de un sentido de pertenencia, el temor a tomar control del destino patrio y la incapacidad de forjar una economía solidaria autosuficiente son algunas de las particularidades que deben replantarse y resolverse en el siglo XXI para que Puerto Rico se constituya como nación caribeña capaz de influir en el desarrollo geopolítico y económico de la región.

Los historiadores ocuparán un papel preponderante en el desarrollo de la sociedad puertorriqueña del siglo XXI. La visión final que se formule de la Nación y su gente dependerá en gran manera del empeño del historiador de integrar el acervo histórico-cultural con la realidad de las comunidades, su pericia para transmitir el sentido de pertenencia a través del conocimiento del pasado y de un presente convulso y voluble, pero pletórico de oportunidades.

¨El rol del historiador es cada vez más interdisciplinario y transdisciplinario¨, indica Carlos José Carrero Morales, quien estudia su doctorado en historia en el Centro de Estudios Avanzados de Puerto Rico y el Caribe. ¨La historia es una en constante cambio y no es predecible. Los seres humanos estamos constantemente escribiendo la historia. Es por eso que disciplinas como la historia, la sociología, la geografía, las artes, la arqueología, entre muchas otras se hace cada vez más necesaria para entender nuestra realidad. El reto está en trabajar de forma interdisciplinaria y transdisciplinaria observando y respetando las “convergencias” de las disciplinas y la pluralidad de realidades¨, añade Carrero.

Carrero Morales representa la nueva generación de historiadores que busca alternativas para construir un país solidario, holístico e integrado capaz de liderar la nación y la región hacia la concientización de su potencial como ente geopolítico y económico.

Educar a las comunidades se hace vital dentro del proceso de repensar la Nación puertorriqueña, el apoderamiento de la puertorriqueñidad es esencial para la formación de puertorriqueños y puertorriqueñas con un sentido de pertenencia sólido, orgullosos de su acervo histórico-cultural.

¨La interdisciplinariedad se hace latente y necesaria. Pensar en la historia “única y verdadera” basada en los documentos es algo erróneo. No podemos desprendernos de los documentos históricos pero la historia oral, las narraciones, las expresiones culturales son igualmente válidas al momento de construir la historia…¨, puntualiza Carrero. ¨Hay que integrar a las personas de las comunidades en los procesos de escribir la historia de sus espacios sociales. Es un proceso participativo de apoderamiento de los diversos actores, necesario para desarrollar un amor y sentimiento de pertenencia por su comunidad, por su pueblo y por su país¨, concluye el historiador y planificador social y ambiental.

Pero, ¿cómo se forma un historiador con la convicción de integración comunitaria? ¿Ayuda el sistema educativo a incentivar la participación histórica en el proceso nacional?

Carrero Morales, nació en Mayagüez, pero se crió en Rincón, en el campo, ¨cuidado chivos y gallinas, sembrando maíz y gandules con mi abuelo¨. Considera que la capital del surfing es ¨un sancho cultural, donde se habla un perfecto “spanglish”, donde la mezcla de culturas es la norma¨.

Se inició en el ámbito cultural desde muy pequeño, participó en grupos de bailes típicos y en certámenes de poesía. Recuerda los festivales del descubrimiento con carrozas y música, los paseos de la Virgen del Carmen por la bahía de Aguadilla, municipio al que llama ¨mi segundo pueblo¨.

La historia siempre le llamó la atención, pero los educadores que tuvo no incentivaban el aprendizaje ni hacían amena la clase.

¨La historia me gustó desde pequeño, pero no me agradaban las clases de historia. Cuando tomé el primer curso universitario de Historia de Puerto Rico con el profesor e historiador, Mario R. Cancel-Sepúlveda, en la UPR-Aguadilla fue el momento en que comencé a apreciar la historia como disciplina¨, expresa Carrero Morales.

La historia es la base de la cultura, pues el acervo nacional se solventa en el conocimiento de la conformación de la nacionalidad.

“La cultura puertorriqueña es una muy diversa. Sí, es la bomba, la plena, la décima, el aguinaldo, la talla de santos, las artesanías, pero también es el rock, es el surfing, es el arte urbano, es la música clásica, etc. Nuestra cultura puertorriqueña es una muy sólida, se nutre de diversas influencias y se condensa como una expresión que nos identifica”.

La conciencia histórico-cultural de Carrero Morales se fragua en las escuelas públicas de Rincón. Luego estudió en la Universidad de Puerto Rico en Aguadilla donde obtuvo un Grado Asociado en Ciencias Sociales, en la Universidad de Puerto Rico en Mayagüez terminó un Bachillerato en Sociología y en la Universidad de Puerto Rico en Río Piedras completó una Maestría en Planificación con doble concentración en planificación social y ambiental. Actualmente estudia un Grado Doctoral en Historia de Puerto Rico y el Caribe del Centro de Estudios Avanzados de Puerto Rico y el Caribe.

Es un estudiante proactivo, que no ceja un segundo en apoyar el desarrollo de proyectos que abonen la conciencia nacional y fomenten el sentido de pertenencia a la Patria.

¨Cuando estudiaba en la UPR-Aguadilla pertenecí a la organización Praxis de los estudiantes de Ciencias Sociales, en la UPR-M formé parte de la Unión Estudiantil de Sociología y formaba parte del colectivo artístico de la Revista Puñal de Epifanía. En la Escuela Graduada de Planificación (UPR-RP) no había una organización de estudiantes pero siempre estuve vinculado como líder estudiantil. Incluso fui uno de los fundadores de los Ven Te Tu Poéticos en el patio de la EGP que eran unos juntes de lectura de cuentos, poesía, canciones y pintura¨.

Carlos Carrero es pasado presidente de la Asociación de Estudiantes Graduados de Historia en el CEAPRC y el representante estudiantil en la Asociación Puertorriqueña de Historiadores. El joven historiador considera que uno de sus logros más significativos fue lograr unir cinco asociaciones de estudiantes, graduados y sub graduados de historia de diferentes universidades para realizar el Primer Encuentro Nacional de Estudiantes de Historia de Puerto Rico.

¨La actividad marcó un hito para los estudiantes. Las nuevas generaciones de historiadores dimos un paso al frente, sin menospreciar la Vieja Historia, la Nueva Historia o el movimiento Posmoderno, con valentía dejamos claro nuestro compromiso para continuar con la historiografía puertorriqueña. Estudiantes, profesores, familiares y público en general se dieron cita durante tres días muy intensos de trabajos estudiantiles. Esto nos llevó a recientemente coordinar un Segundo Encuentro Nacional de Estudiantes de Historia. En esta ocasión fueron ocho las organizaciones que nos unimos para compartir trabajos e investigaciones de estudiantes de historia de toda la Isla¨.

El orgullo que siente Carlos José por el CEAPRC se palpa cada vez que menciona el centro educativo fundado por el Dr. Ricardo Alegría y dirigido por el arqueólogo Miguel Rodríguez López.

¨Pienso que el Centro de Estudios Avanzados de Puerto Rico y el Caribe es una excelente institución universitaria que debe seguir evolucionando en aras de mantenerse a la vanguardia. La creación de nuevos programas académicos quizás en antropología, geografía, historia económica, historia ambiental, gestión internacional o turismo histórico-cultural¨.

Carlos destila orgullo patrio, cada palabra, cada acción es una reafirmación de su puertorriqueñidad.

¨No sabría decir si resolveremos nuestro estatus colonial, pero sí creo que debemos estar observando un cambio muy pronto. En términos muy personales tengo la esperanza de que las puertorriqueñas y los puertorriqueños despertaran del letargo para tomar las riendas de su destino fuera de la colonia. Eso no significa que no podamos mantener relaciones económicas y cordiales con el imperio, pero sí que lo hagamos de pie en relación de respeto e igualdad¨.

Carrero vive orgulloso de sus padres Mercedes Morales Moya, natural de Aguadilla y Carlos J. Carrero Cordero, nacido en Rincón. Admira a su hermana, Mercedes Carrero Morales, quien es educadora en Añasco y también estudia historia.

Considera que además de sus familiares, las personas que más han influido en su formación educativa y profesional son la socióloga Dagmar Galarza, el planificador Félix Aponte y el antropólogo Manuel Valdés Pizzini, ¨quién fue mi profesor, mentor, jefe, amigo y colega¨.

El historiador es poeta, publica su poesía en su blog personal, disfruta del surfing y estudia su impacto social en Rincón, apoya proyectos escolares que colaboren en la formación de estudiantes como líderes y ciudadanos comprometidos.

Está concentrado en culminar su doctorado y continuar investigando la historia puertorriqueña.

¨He ido aprendiendo que la vida me va llevando a diferentes direcciones. Más bien prefiero estar preparado para enfrentar los diversos retos que se me presentan. Con los pies muy firmes en la tierra deseo seguir caminando y en un constante aprendizaje¨.