Ingredientes
• 32 alitas de pollo partidas en dos, por la junta -que lo haga el carnicero-
• Zumo de limón
• Perejil picado
• 1 punta de miel
• 4 dientes de ajo aplastados
• 1 pizca de salsa de soja
• Harina y sal
• 4 dientes de ajo con piel
• Aceite de oliva para freír
Preparación
Sazonamos alegremente las alitas de pollo y las colocamos en un bol, rociándolas con zumo de limón, la salsa de soja, la miel, el perejil picado y los dientes de ajo aplastados.
Dejamos en reposo en la nevera un par de horas.
Pasadas, escurrimos los trozos de pollo y los enharinamos ligeramente, sacudiendo el exceso.
En una sartén colocamos abundante aceite de oliva al fuego y sumergimos los dientes de ajo con piel, calentando pausadamente para que se aromatice.
A los 5 minutos de fuego medio, avivamos la intensidad y dejamos que el aceite se caliente, retirando los ajos si vemos que van a quemarse, puesto que dejarán mal gusto en el aceite.
Freímos las alitas de forma que queden muy tostadas, escurriéndolas en papel absorbente.
Las servimos con ensalada o patatas fritas.
Quedan muy buenas untadas en salsa all-i-oli.
Crédito foto: Geoff Peters, www.flickr.com, bajo licencia de Creative Commons (https://creativecommons.org/licenses/by-nd/2.0/)