Victoria and Abdul – o las mil y una noche de la experiencia colonial

Cine caribe

altEl pasado 28 de diciembre, en la tradición católica del judeo-cristianismo, no así en la hebrea, hindú, yoruba, musulmán y otras religiones, se celebraba el día de los santos inocentes. Lo que es una tradición religiosa, tiene una vertiente pagana, que es hacer bromas sobre hechos falsos, o información no cierta. Es decir, y en la lógica del presidente de turno en los EE.UU., Donald Trump, se trata de noticias falsas o parte de la post-verdad. Entonces, cierto sector corporativo de la prensa de Puerto Rico se dedicó a informarnos una noticia, sobre la devolución de Puerto Rico a España. Es un chiste de mal gusto, pero que provocó que 100 mil personas quisieran ver la noticia.

La parte que no es un chiste de la noticia es pensar que los boricuas les interesa ser colonia de los EE.UU. o de España. Es un chiste de muy mal gusto, que uno quisiera entender quien lo pensó y redactó. ¿A quién le interesa ser colonia de España hoy? ¿Ser colonia de España es mejor que ser colonia de los EE.UU.? Terrible como se expresa la condición colonial. ¿Un esclavo prefiere ser esclavo de otro amo? El que no haya vivido en carne propia la humillación o explotación en una relación social, no puede pensar de cómo es la experiencia en sí de la humillación.

Ante esta “inocente” introducción, nos enfrentamos a una película de cine de discernimiento cultural (fine art en inglés) en Puerto Rico. Se trata de Victoria and Abdul (Dir. Stephen Frears, Reino Unido, 2017). La misma narra un periodo oscuro del imperio británico, bajo la controversial reina Victoria (Judi Dench). Reinado que promovió los estándares del imperio, bajo el control de dos terceras partes de la humanidad, la película nos cuenta la relación entre la reina Victoria y su sirviente/servidumbre/esclavitud colonial de Abdul Karim (Ali Fasal).

Sí a usted le gusta ser esclavo, entonces, esta película le debe de gustar. Si a usted le gusta ser un sujeto colonial y colonizado, esta película le debe de encantar. Sí usted no le gusta ninguna de las dos posturas antes mencionadas, entonces implosione esta película.

Estéticamente la película es un buen trabajo. Desde la mirada del guion es un trabajo interesante. Ahora bien, desde la mirada de las relaciones colonizador/colonizado, la película es terrible.

Puede irla a ver si usted es fanático de Judi Dench, quien siempre actúa de forma perfecta. Las otras actuaciones son adecuadas. El resto, mejor seguimos en el día de los inocentes. La película es una broma de mal gusto.