Los derechos de los animales – ¿son constitucionales?

Política

Tengo una gran preocupación: si trato de forma dura a mi mascota, cometo el delito de maltrato de animales. Si alguien da muerte a un animalito, comete el delito de asesinato. Entonces, si maltrato a mi pareja, me acusan de violencia doméstica en la modalidad de maltrato; si doy muerte a un ser humano, lo asesino. Entonces, vivo en un país, que tanto seres humanos como animales son tratados de igual forma. ¿Será correcto dicho tratamiento equivalente? No sé.

Los ciudadanos son los que tienen derechos ante el estado. Los extranjeros de ordinario no lo tienen. Pero que un animal, doméstico o salvaje, tenga iguales derechos que una persona, es para mi bastante problemático. En particular, porque la subjetividad en torno al trato adecuado o inadecuado, es algo que sólo un tercero lo puede reclamar. No sabemos si el animal lo reclama, por decir lo menos, y más aún, desconocemos si las nociones humanas en cuanto a la vida y la muerte son apreciadas de igual forma por un animal que por un ser humano.

Me parece que hay que controlar los límites de los discursos jurídicos. Las especies tienen, cada una de ellas, forma particulares de defenderse. Introducir los discursos humanos, puede ser un tanto problemático. En la medida que normalizamos y equiparamos los derechos de los animales a los de los humanos, lo que hacemos de facto es expandir la red social administrada por el estado sobre la población. Es decir, el estado se dedicará a criminalizar y/o regular, mayor cantidad de instancias sociales.

Cuidado, no deje de sonreírle a su mascota. Podría meterse en problemas.