NUEVO EQUIPO PARA COMBATIR NARCOTRAFICO EN PUERTO RICO

Política

El Gobierno de Luis Fortuño se ha quejado en los últimos meses de que Puerto Rico ha sido ignorado por el Gobierno del Presidente Barack Obama en su lucha contra el narcotráfico, la cual a juzgar por los sucesos de violencia en los últimos años parece estar fracasando en la Isla. Pero la visita de la Secretaria de Seguridad Interna Janet Napolitano y el anuncio de un nuevo acuerdo que proveerá más herramientas a Puerto Rico en su batalla por frenar la llegada de narcóticos a la Isla parecen haber traído la armonía entre los dos gobiernos.

El Gobernador junto al representante territorial de Puerto Rico en el Congreso norteamericano, Pedro Pierluisi, se habían quejado de que los recursos del gobierno de Obama estaban desproporcionadamente destinados a combatir el tráfico y la violencia en la frontera de Estados Unidos y México. Los acuerdos parecen ofrecerles a las autoridades locales más apoyo en sus esfuerzos. Se anunció el reemplazo el año que viene del aerostato usado para detectar el tráfico de naves de contrabando por mar y aire por uno nuevo más sofisticado, la adición de seis sofisticadas embarcaciones para la Guardia Costanera y la ampliación de las facilidades de esta en la ciudad capital de San Juan. También se añadirían nuevos aviones sin tripulación para detectar naves narcotraficantes y más aviones para las autoridades federales encargadas de aduana, mayores recursos para las agencias locales y federales encargadas de combatir el narcotráfico y por último se proveerá más ayuda a la policía de Puerto Rico con tecnología e inteligencia.

 

En una entrevista con el diario El Nuevo Día Napolitano negó que alguna vez se hubiesen reducido los recursos federales en Puerto Rico para enfocar en los esfuerzos en la frontera con México, sino que la situación en esa frontera hizo necesario que el Congreso aprobase más fondos para combatir el flujo de drogas y violencia en ese frente. A pesar del desmantelamiento de organizaciones criminales a través de los años en el aeropuerto principal de la Isla, incluyendo uno el mes pasado, Napolitano dijo que no entiende que ese punto de entrada sea especialmente vulnerable a la introducción de narcóticos a la Isla. Dijo que en general se puede hace mucho con la tecnología y los recursos humanos para detectar el tráfico.

Mientras tanto, de acuerdo a Fortuño, quién con varias personas de su gobierno y funcionarios federales se reunieron con Napolitano, la secretaria iba a medir la efectividad de los esfuerzos anti-narcotráfico por la cantidad de asesinatos en la Isla, la mayor parte de los cuales se entiende es producto de guerras entre bandos de traficantes. Se espera que este año el número de los asesinatos en este territorio de 3.7 millones de habitantes ronde o sobrepase los 1,000 como lo hizo el año pasado. El Superintendente de la Policía Héctor Pesquera, un ex alto funcionario del Buró Federal de Investigaciones (conocido por el FBI, por sus siglas en inglés) dijo que la secretaria había elogiado los grupos de acción (task forces) entre la policía y agencias de interdicción federales.

Por su parte, Napolitano se mostró parca en la entrevista con el diario, diciendo que ya se están haciendo cosas nuevas entre las agencias en Puerto Rico, pero que por razones estratégicas no podría dar más detalles. Cuando se le preguntó si Puerto Rico podría convertirse en un narco-estado, dijo que esto no era posible porque existen instituciones estables en Puerto Rico y todavía existe un orden de derecho, contrario a un narco-estado en el que estos existen solo en nombre.