Rosselló y sus “brothers” pertenecen al 9no círculo del infierno de Dantes

Caribe Hoy

altEn menos de 72 horas desde que salieron a la luz pública el primer grupo de chats de Telegram del Gobernador Ricardo Rosselló Nevárez y su círculo de allegados, los “brothers”, se ha destapado la “olla de grillos” que gobernaba desde la fortaleza. Rosselló fue interpelado a regresar de forma urgente de su viaje de vacaciones, y con gran desfachatez se dirigió al pueblo para pedir un “mea culpa”, alegando que el chat era privado, y que lo utilizó para “liberar tensiones”.

Lo que pasa es que esa excusa del gobernador no es una justificación real ni aceptable. Si lo fuera, tendríamos que aceptar cuando un depredador sexual nos dijera que abusa de sus víctimas para liberar sus tensiones físicas y emocionales, o cuando una persona que vende sustancias o que comete robos nos dijera que lo hace para liberar tensiones económicas. A parte de lo vergonzoso del contenido del chat, lo realmente importante en toda esta odisea, es que nos dio la oportunidad y nos presentó a la figura de quien fue electo para gobernar a este país tal y como es, totalmente cómodo y desenmascarado en su propia piel. Los chats nos presentaron y nos dejaron ver a un Ricardo Rosselló Nevárez corrupto, manipulador, embaucador, misógino, racista, clasista, homofóbico, sin empatía, burdo, soez y engreído en su propio poder.

Ricardo Rosselló y su círculo íntimo: Ramón Rosario, Luis G. Rivera Marín, Ricardo Llerandi, Anthony Maceira, Carlos Bermúdez, Rafael Cerame, Alfonso Orona, Christian Sobrino, Edwin Mirando y Ramón Rosario, todos son igualmente despreciables. Ninguno tuvo la entereza de decirle a Roselló, que dicho sea de paso era el administrador del chat, gobernador seamos respetuosos, gobernador está fuera de lugar. Hago un paréntesis, porque Ramón Rosario, quien se sospecha fue quien filtró el chat, en un momento llamó la atención, pero no lo hizo para que descontinuaran profiriéndose insultos e injurias contra mujeres u otros ciudadanos, lo hizo, porque de ese chat surgen muchas componendas, conspiraciones y actos de corrupción que el gobierno de Rosselló se ideó para adelantar su agenda política. Lo que pasa es que una vez Rosario es expulsado del circulo, como Judas, corre a vender a su jefe, que si algo es, es anticristo.

El 9no cíirculo del infierno de Dante se reserva para los traidores. Ese círculo se divide en cuatro recintos: Caina, Antenora, Tolomea y Judeca. En Caina, están los traidores a los allegados, esos están sumergidos en hielo hasta la cabeza con la cara hacia abajo. En Antenora, están los que traicionaron a colectivos a los que pertenecían, y se encuentran sumergidos con la cara hacia arriba o con hielo que cubre la mitad de la cabeza. En Tolomea, están los traidores de los huéspedes, esos están sumergidos en el hielo con la cabeza echada hacia atrás, para que se les congelen las lágrimas en los ojos, evitando dar rienda suelta a la pena en lágrima. Por último, en Judeca, están los que traicionaron a los benefactores; esos están inmersos en el hielo, pero en diferentes posiciones, según el objeto de su traición. En el centro del Infierno está Satanás.

Aunque Ricardo Rosselló y sus secuaces, sin duda, también podrían habitar el 8vo círculo del infierno reservado para fraudulentos que no fueron dignos de la confianza, los políticos corruptos, malversadores de dinero público. Realmente el carácter y las actitudes que se desenmascararon de esos chats, los llevan al círculo de los traidores de la confianza de un país completo.

¿Qué cosa positiva, si algo, nos han traído estos “chats”? Al parecer estos chats son la gota que colmaron la copa, y la chispa que faltaba para encender la ira de todos los puertorriqueños y puertorriqueñas, para levantarnos como un solo pueblo y decir ¡basta ya! Ricardo Rosselló el pueblo exige tu renuncia inmediata. Eso a Puerto Rico lo liberará algunas tensiones.