El ABECEDARIO LGBTQ [en el ambiente]

No te engañes…L, G, T y B son las letras de un alfabeto escrito con “sangre, sudor y lágrimas". Detrás de cada una de ellas se esconde una historia de lucha y reivindicaciones que, con mucho en común, es tan diversa como los colectivos representados en este abecedario "arcoíris".

Pero L,G,T y B son mucho más que unas siglas…

Dame la L: Atrás quedaron los días del Marimacho o Cachapera. Las mujeres lesbianas siempre han estado en la lucha por los derechos civiles LGTB, a pesar de que en un principio su participación resultaba casi invisible. Hoy en día han cobrado más peso y visibilidad. Sus exigencias buscan medidas para combatir la doble discriminación que sufren por su sexo y por su orientación sexual, el reconocimiento legal de sus hijos sin necesidad de contraer matrimonio, el acceso a técnicas de reproducción asistida en la salud pública o un trato adecuado realizados por profesionales de la salud.

Dame la G: Hoy en día Gay es la palabra “politicamente correcta” para el otrora Pato o Maricón. Desde la G el Homosexual reclama la plena capacidad de la persona para decidir con total libertad de quién se enamora y a quién ama, algo solo posible si se acaba con la discriminación por motivo de orientación sexual, identidad y expresión de género y características sexuales.

Dame la T: Lento pero seguro se fueron incorporando "otras realidades" comenzando por el Transexual, aunque las mujeres transexuales fueron las primeras en salir en el histórico Stonewall de junio de 1969. No cabe duda de que son una realidad basada en la identidad de género y no en la orientación sexual, lo que explica que muchas de sus demandas sean distintas: la transexualidad no es una patología, además la autodeterminación, el reconocimiento de la identidad de los menores, los tratamientos y cirugías asumidas por la salud pública y que se apliquen no solamente a mayores de edad sin necesidad de un diagnóstico de disforia (trastorno de identidad).

Dame la B: Los bisexuales habían estado bajo la sombrilla de lesbianas y gays porque muchos asumían como propias sus reivindicaciones. Aún así demandan mayor sensibilización en todos los ámbitos familiares, educativos, culturales y laborales; además de reclamar herramientas para lograr una mayor inclusión, combatir la bifobia, el monosexismo y el binarismo de género causantes de muchos mitos de la bisexualidad y poner en la agenda social y política su realidad como una más.

A este abecedario añadimos la I de intersexuales, la A de asexuales y la Q de "queer", que hace referencia a las personas no heterosexuales. Para terminar qué mejor que el signo + que, al margen de siglas, prefiere hablar del "orgullo de la diversidad sexual de género y familiar".