Lo mejor del debate es que [nada pasó] se impuso “el quieto y el callao”

Política

(San Juan, 9:00 a.m.) Contrario a termino nadie ganó o deslumbró en el debate de anoche entre los candidatos a la gobernación. El llamado “Debate Decisivo” resultó ser un vaso o cubeta de agua fría para todos y todas que participaron, pero sobre todo para sus seguidores políticos. ¿Por qué? Muy sencillo:  porque la suerte ya está echada.

El debate fue madrugado.  El miércoles pasado, el Partido Popular Democrático (PPD), por vía de la estación Radio Isla, haciendo uso de las encuestas que de forma rigurosa el profesor Jorge Benítez (UPR RP) lleva sobre un año haciendo en el país (a una muestra similar de sobre mil personas) semanalmente, presentó unos números que eran por decir lo mínimo simpáticos.  Bajo dichos números, el PPD estaba ganando la contienda, el Partido Nuevo Progresista (PNP) la estaba perdiendo, el Partido Independentista Puertorriqueño (PIP) estaba en una tercera [e impresionante] posición, y el Movimiento Victoria Ciudadana (MVC) aparecía en una cuarta posición perdiendo terreno político.

Usted no le debe de creer a nadie, pero esa fue la encuesta que el miércoles lanzó el PPD para contrarrestar, lo que aparentaba ser el anuncio de la encuesta del GFR Media (para ese mismo día).  Dicha encuesta representaba a Pedro Pierluisi ganando la contienda. Pero fueron madrugados, en estrategia sagaz por el PPD.  El resto es la historia [folclórica] nacional.

Por ende, según el propio GFR Media, Pedro Pierluisi fue el ganador de la contienda de anoche. Usted decida. Lo cierto es que él fue uno mas de varios que no dijo nada nuevo. Si contestó correctamente sus preguntas, se alteró, pero más allá de indicar que el estatus es la estadidad, y que hay que combatir la corrupción, nada nuevo aportó.

De esta forma los otros candidatos, Eliezer Molina (Movimiento de Conciencia, Independiente), Juan Dalmau (PIP) y Alexandra Lúgaro (MVC) no aportaron mucho. Por otras razones.  No aportaron porque en la agresividad de Molina (“usted es un corrupto”) o en la de Lúgaro (“usted es un usurpador”), más allá de lo simpático que resulta al populismo, no hay proyecto de país. Y lamentablemente ayer no fue la noche de Dalmau, quien por pensar que en no cuestionarle a Alexandra Lugaro su pasado, ganaba puntos, perdió él, el momento y oportunidad política.  Tan ausentes han estado de las luchas por la igualdad personas como Charlie Delgado (PPD), Pedro Pierluisi (PNP), como la propia Alexandra Lúgaro (MVC).

En esta medida, cuando Lúgaro atacó a Pierluisi y a Delgado por el bipartidismo y la corrupción, Dalmau perdió una oportunidad única para alzarse sobre los tres.  En particular, porque el PIP, sea lo que sea, no tiene escándalos a nivel político ni personal. Los otros tres combinan escándalos políticos o personales. Se trató de una oportunidad fallida, que Dalmau/PIP no supieron capitalizar.

Curiosamente quien creo que salió consistente en su verbo y presencia fue el candidato conservador César Vázquez.  Este sin alarde, apoyó un gobierno no corrupto, es decir buen administrador (como sugirió y aceptó todo el mundo a partir de Juan Dalmau en el segundo debate de los candidatos), y por otro lado, siendo estadista, no vio en el plebiscito la urgencia de decir si o no. Que cada cual vote, como él, por lo que cree. Problemática su tranquilidad.

Este fue posiblemente el peor de los tres debates. Posiblemente fue así porque la suerte ya está echada.  Las encuestas de Radio Isla/Jorge Benítez tienen algo de verdad.  Tienen algo de verdad.  Todo indica que el bipartidismo se impone, por vía del PPD, que Pierluisi y Jennifer pierden en la contienda, que el PIP es la gran sorpresa y que MVC se desinfló (están regresando al PPD según Radio Isla/Jorge Benítez). Son solo números, pero altamente persuasivos, por lo pronto a nivel psicológico. Pensemos.