Elecciones [democráticas] en Venezuela

Justicia Social

(San Juan, 1:00 p.m.) El domingo 6 de diciembre de llevaron las elecciones democráticas en Venezuela para elegir el nuevo parlamento nacional (Asamblea Nacional).  De 20 millones de electores inscritos, participaron casi seis millones para un 31 por ciento de electores ante la contabilización del 82 por ciento del sufragio. En otras palabras, la democracia, de muchos o de pocos, se ejerció.

El Gran Polo Patriótico, la alianza del MAS-Chavismo con otros partidos de izquierda, se llevó el 67 por ciento de los votos en la legislatura. Los partidos de oposición que participaron, se llevaron el resto de los votos y escaños.  De un total de 277 escaños el GPP se lleva 177 posiciones y la oposición 97.  Se trata de un proceso democrático en el cual el GPP tiene mayoría absoluta y de más de dos terceras partes para hacer los cambios que sea necesarios en la legislación.

Con este cuadro, la oposición llevaba días anunciando el fraude.  No había habido elecciones y ya había fraude. Una vez se consumaron las elecciones, siguieron hablando de fraude. No obstante, los 200 observadores internacionales que participaron, así como los 1600 “veedores” , observadores locales creados por la ley electoral de Venezuela, no vieron o alegaron irregularidades.

Pese a todo, y pese a la certeza del proceso electoral venezolano, uno de los mejores del mundo,  el secretario de estado de los EE.UU., Mike Pompeo, catalogó el proceso como un fraude.  De esta forma, mientras hoy Venezuela celebra un proceso electoral, tanto Europa como los EE.UU. hablan de fraude.  Realmente hablando, ¿tiene algún peso en la geopolítica global hoy, lo que digan estos dos bloques de poder?  Los tiempos han cambiado. ¡Viva Venezuela!