No más americanos en Puerto Rico [tomando ventaja de nuestra generosidad]

Política

(San Juan, 1:00 p.m.) Un influencer llamado Logan Paul anuncia que viene a vivir a Puerto Rico a tomar ventaja del estado de derecho, que le permite a él hacerse rico sin pagar contribuciones, y a nosotros nos deja como empleados de $7.25 la hora.  Patético, pero es tan horrible la explicación que él da en la prensa comercial, como la respuesta violenta de una turista americana contra una mujer en silla de ruedas.

Es escandaloso el colonialismo social que hoy, distinto al jurídico y político, están viviendo los boricuas residentes en la isla.  Para los boricuas que se fueron a los EE.UU., el racismo, la exclusión o marginación selectiva, es el pan nuestro de cada día. Ya sea por necesidad, por opción o placer, ellos optaron en irse o nacieron y se criaron allí. Lo cierto es que viven en condiciones de opresión en muchos casos que son innombrables o indecibles.

Ahora bien, que los boricuas que vivimos en la isla, que nos quedamos aquí, seamos ahora perseguidos o manipulados por los americanos que vienen a tomar ventaja de nosotros, a maltratarnos y hacerse ricos a cambio que las escuelas públicas no tengan tiza, es inaceptable. No sin lugar a dudas, las redes sociales, así como la legislatura de Puerto Rico comienzan a hablar de esta situación y a mostrar interés por resolver el problema. 

Es momento de que los boricuas planteen afirmar y defender su dignidad.  Es momento de decirle al pueblo americano, ese que vive a partir del estado de la Florida, que venir a Puerto Rico es a pasarlo bien, lo cual incluye el respeto a nuestras tradiciones y nuestra identidad nacional.  Es momento de defender al pueblo boricua de las agresiones y humillaciones. Pensemos.